NATIVIDAD DEL SEÑOR - Misa de la Aurora: Preparemos con las Lecturas y con el Catecismo la Acogida de la Palabra de Dios proclamada durante la celebración festiva
Con las Lecturas Con el Catecismo
Recursos adicionales para la preparación
¿Cómo acoger la Palabra de Dios?
Falta un dedo: Celebrarla
Lectura del libro
del profeta Isaías 62, 11-12
Esto es lo que el Señor hace oír hasta el extremo de la tierra:
«Digan a la hija de Sión: Ahí llega tu Salvador; el premio de su victoria lo
acompaña y su recompensa lo precede.
A ellos se los llamará "Pueblo santo". "Redimidos por el Señor"; y a ti te
llamarán "Buscada", "Ciudad no abandonada".»
Palabra de Dios.
SALMO Sal 96, 1 y 6. 11-12
R. Hoy brillará una luz sobre nosotros,
porque nos ha nacido el Señor.
¡El Señor reina! Alégrese la tierra,
regocíjense las islas incontables.
Los cielos proclaman su justicia
y todos los pueblos contemplan su gloria. R.
Nace la luz para el justo,
y la alegría para los rectos de corazón.
Alégrense, justos, en el Señor
y alaben su santo Nombre. R.
Lectura
de la carta del apóstol san Pablo a Tito 3, 4-7
Cuando se manifestó la bondad de Dios, nuestro Salvador, y su amor a los
hombres, no por las obras de justicia que habíamos realizado, sino solamente
por su misericordia, él nos salvó, haciéndonos renacer por el bautismo y
renovándonos por el Espíritu Santo. Y derramó abundantemente ese Espíritu
sobre nosotros por medio de Jesucristo, nuestro Salvador, a fin de que,
justificados por su gracia, seamos en esperanza herederos de la Vida eterna.
Palabra de Dios.
ALELUIA Lc 2, 14
Aleluia.
¡Gloria a Dios en las alturas,
y en la tierra, paz a los hombres amados por él!
Aleluia.
+ Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según san Lucas 2, 15-20
Después que los ángeles volvieron al cielo, los pastores se decían unos a
otros: «Vayamos a Belén, y veamos lo que ha sucedido y que el Señor nos ha
anunciado.»
Fueron rápidamente y encontraron a María, a José, y al recién nacido
acostado en el pesebre. Al verlo, contaron lo que habían oído decir sobre
este niño, y todos los que los escuchaban quedaron admirados de lo que
decían los pastores.
Mientras tanto, María conservaba estas cosas y las meditaba en su corazón. Y
los pastores volvieron, alabando y glorificando a Dios por todo lo que
habían visto y oído, conforme al anuncio que habían recibido.
Palabra del Señor
Con el Catecismo de la Iglesia Católica entender y vivir la Palabra: