Apologética:
Un tratado clásico
Misioneros del Sagrado Corazón de Jesús
Lima – Perú 1944
"Sea amado en todas partes el Sagrado Corazón de Jesús"
Contenido
1. – PRUEBAS DE LA EXlSTENCIA DE DIOS
A.– LOS ARGUMENTOS COSMOLÓGICOS
B. LOS ARGUMENTOS PSICOLÓGICOS
A) Atributos de la Naturaleza Divina.
B) Atributos de la Vida Divina.
b) Atributos de la voluntad divina.
6. -UNIDAD DE LA ESPECIE HUMANA
3. -OBLIGACIÓN DE PROFESAR LA RELIGIÓN
5. -DOCTRINA CATÓLICA SOBRE EL ORIGEN DE LA
RELIGIÓN
2.-LA POSIBILIDAD DE LA REVELACIÓN
3.-LA NECESIDAD DE LA REVELACIÓN
4.-LOS CRITERIOS DE LA REVELACIÓN
7.-VALOR PROBATORIO DEL MILAGRO Y DE LA PROFECÍA
EL HECHO DE LA REVELACIÓN CRISTIANA
1.-DOCTRINA DE LA IGLESIA SOBRE EL HECHO DE LA
REVELACIÓN
3.-AUTORIDAD DEL NUEVO TESTAMENTO COMO LIBRO
HISTÓRICO
1.-FUNDACIÓN DE LA IGLESIA CATÓLICA POR
JESUCRISTO
4.-LAS PRERROGATIVAS DE LA IGLESIA
LA IGLESIA CUERPO MÍSTICO DE CRISTO
CÁNTICO
A LA GLORIA DE DIOS CREADOR
¡¡PIEDRA...
!!
¡Oh
Piedra,
también tú
eres una
reliquia de sus manos...!
Tus
invisibles átomos
de la Nada
brotaron
cuando Él
lanzó su “fíat” soberano...!
¡Oh
Piedra,
qué
misterios
podrías tú
contarnos...!
Tu
asististe al milagro de aquel “fíat”
que
estremeció la Nada
y en ella
hizo brotar Mundos y Espacios...!
¿En qué
ardientes crisoles estuvieron tus átomos...? ¿,Qué viajes gigantes
veloces
emprendieron
por el
inmenso Espacio ...?
Hasta
cuajar en piedra,
¡qué
camino tan largo: ..!
Mas ellos
allí estaban
cuando se
obró el milagro...!
Tus
átomos. ¡Oh Piedra!
¡Qué
poemas eternos presenciaron...!
Primero,
el “fíat” que cual trueno inmenso,
con
vibración gigante,
estremeció
de'l caos los arcanos...!
Después...
una visión de maravilla,
en que
Mundos y Espacios surgieron de la nada cual Colosos,
y su
propia existencia
miraron
asombrados...!
¿Después...? El orden que con mano experta
imprimió
el Infinito en lo creado,-
y las
leyes supremas y grandiosas
que habían
de regir astros y átomos...!
¡Y enseguida...
enseguida...
la
evolución inmensa... el movimiento...
y el
comenzar los mundos
sus ciclos
milenarios...!
Mil
órbitas gigantes e invisibles
el dedo
del Eterno
trazó en
el hondo Espacio.
Y
empezaron los Mundos
su marcha
milenaria
por las
calladas sendas
que los
divinos dedos dibujaron...!
¡Pensar...
pensar... ¡Oh Piedra!
que todas
estas cosas
podrías tú
contarnos
¡Allf
estaban presentes
los átomos
que ahora tienes aprisionados
Entonces
libres, . libres...
formando
acaso parte
de inmensa
nebulosa,
flotarían
radiantes
en el
inmenso Espacio...
¡Lo
presenciaron todo...
y en tu
interior, ¡Oh Piedra!
celosamente
tienen su secreto guardado...!
...¡Oh
Piedra, qué deseos
siento de
acariciarte con mis manos...!
¡:Qué
anhelo de escucharte
y que me
cuentes todos los misterios
que sabes
del Arcano...!
¡Oh
Piedra! ¿Acaso ignoras,
que Aquel
que de la nada te ha sacado,
es el
mismo que a mí
con amor
infinito me ha creado...?
Mira...
¡somos hermanas!
¡Cuéntame
lo que sabes del Amado...!
Dolores
Riesco.
APOLOGÉTICA
Introducción
1.
Definición literal.– La palabra Apologética se deriva del griego y significa
“defensa”. “Apologías” se llamaron ya los escritos de filósofos cristianos que en los primeros siglos del Cristianismo
defendían con argumentos científicos la
fe católica contra los ataques y calumnias de los paganos.
2.
Definición real.– Apologética es la ciencia que propone y prueba las verdades
fundamentales de la Religión Católica y las defiende contra sus enemigos.
Demuestra así por argumentos de la razón la credibilidad de la Religión
revelada por Cristo.
3.
Importancia de su estudio.
a) A los
creyentes la Apologética les sirve para confirmarlos más en su fe. Los jóvenes
sobre todo, que entran en una vida, prácticamente profanada y paganizada, corren
el gran peligro de perder de vista la Religión como el factor más decisivo para
la vida. La Apologética brinda a la inteligencia del joven, ávido de Luz y de
verdad, la sorpresa, a veces sensacional, de que la Religión y su práctica es
lo más racional y sensato; que es de candente actualidad y de indispensable
ncesidad para la vida moderna y la solución de sus graves problemas.
b) A los
que están en el error la Apologética es de suma utilidad para allanar el camino
hacia la verdad. A su luz 'se deshacen. muchos perjuicios tan numerosos entre
los extraviados y herejes de la actualidad; muchos errores desaparecen: ,
librando así de muchos obstáculos al hombre que sinceramente busca la verdad..'
c) A los
enemigos de la fe se opone la Apologética como baluarte inexpugnable. Pues el
incrédulo moderno se jacta de la ciencia, y es la misma ciencia la que en la
Apologética se enfrenta a él, suministrándole los argumentos meramente
científicos contra sus falsas creencias y arbitrarias negaciones de la verdad.
I.
DIOS
La Iglesia
nos enseña que Dios es el Ser Supremo, Espíritu infinitamente perfecto, creador
y conservador del Universo.
Dice,
además, que este Dios existe en verdad desde toda eternidad. El manifiesta e
impone a los hombres su voluntad que tienen que cumplir. Él decidirá su suerte
eterna.
Esta
doctrina de la Iglesia no puede dejar indiferente a nadie que comprende la
importancia de la existencia de Dios para su vida. Pero no solamente la fe la afirma.
Si, frente
a consecuencias tan decisivas que se derivan de la fe en Dios, preguntamos a
nuestra razón: ¿Qué dice al respecto? su respuesta coincide con la de la fe:
Dios existe en verdad.
1. – PRUEBAS DE LA EXlSTENCIA
DE DIOS
1) Nuestro
modo de argumentar.– Hay 3 caminos para llegar a comprobar la existencia de una
cosa.
a) Por
propia experiencia. Así nos convencemos de la existencia di nosotros mismos y
de los demás hombres que tratamos.
b) . Por
el principio de causalidad. Este principio dice que todo lo que empieza a
existir, debe tener una causa proporcionada. La razón es obvia Pues nadie da lo
que no tiene. Una cosa que no tiene existencia no puede dársela a sí misma.
Debe existir otra que le da la existencia. Así al percibir el humo estamos
seguros de la existencia del fuego. Al ver un reloj sabemos que existe un
relojero que lo hizo. Luego, por medio del principio de causalidad, podemos
inferir con toda seguridad la existencia de una cosa desconocida por ser la
causa de otra ya conocida.
c) Por el
testimonio de otros. De ese modo conocemos los: hechos históricos que no hemos
presenciado y los lugares geográficos que no hemos visto.
Ahora
bien. Para probar la existencia de Dios no es posible el primer camino. Siendo
Dios Espíritu, no podemos verlo. Es inasequible a nuestros sentidos.
El segundo
camino es el camino propio de la Apologética. Todo el Universo manifiesta
claramente que es obra de una causa suprema.
El tercer
camino es el de la, fe, como vamos a explicar en el Capítulo de la Revelación.
2)
División de los argumentos.
– Como
punto de partida de nuestros argumentos tomamos el mundo, es decir, la
totalidad de los seres que nos rodean. Este mundo se nos presenta bajo un doble
aspecto: el mundo material alrededor de nosotros, y el mundo espiritual dentro
de nuestra alma, suministrándonos así dos clases de argumentos:
A) Los
Argumentos Cosmológicos.– Los sacamos del mundo material que en griego se llama
Cosmos.
B) Los
Argumentos Psicológicos.– Les tomamos del mundo interior espiritual de nuestra
alma. Alma significa en griego Psiqué.
A.– LOS ARGUMENTOS
COSMOLÓGICOS
1.
Argumento: Por el origen de la vida.
En nuestra
tierra hay seres vivientes, plantas, animales y el hombre. Pero está científicamente
probado que, en una época determinada, esta vida ha empezado a existir.
Luego,
según el principio de causalidad, ha tenido una causa.
Esta causa
no pudo ser un germen venido de otro astro. Porque todos los astros pasaron por
el mismo estado de incandescencia, que nuestra tierra.
Además, el
frío interplanetario habría destruido cualquier germen que habría podido llegar
a esta tierra.
Esta causa
tampoco podía ser la llamada generación espontánea, o sea el desarrollo de la
vida en la materia inorgánica. Esta posibilidad la descartan la ciencia y la
razón.
La ciencia
moderna, especialmente después de los famosos experimentos de Pasteur,
universalmente reconocidos, declara imposible el origen de la vida por medio
del desarrollo de la materia inorgánica.
La razón,
basándose en el principio de causalidad, dice que la vida, por tener
perfecciones superiores a la materia inorgánica, no puede tener esta materia
como causa proporcionada.
Por eso no
cabe más que. admitir una causa fuera de la tierra que produjo la vida. Este
Ser tan poderoso que causó la 'vida en la tierra lo llamamos Dios.
2.
Argumento: Por el movimiento en el mundo.
Observamos
en el Universo un múltiple movimiento. Se mueven los astros, los mares, los
vientos y muchísimos otros seres.
Pero donde
hay movimiento, allí debe haber un ser que sea la causa del movimiento. Según
el principio de causalidad, un ser inmóvil no puede darse el movimiento que no
tiene. Todo lo que se mueve requiere un motor.
El árbol
se mueve por el viento, el viento por los efectos del calor solar, el calor
solar se debe a los movimientos de las moléculas del sol, etc.
Ahora bien.
En este ejemplo se ve claramente que los seres citados dependen en sus
movimientos uno de otro. Son causas intermedias que mueven a otro, pero que no
tienen la fuerza de mover por sí mismos.
Claro está
que debía haber una causa que dio el primer movimiento y que, por su parte, no
necesitaba otra causa para mover. Debe mover por sí misma, sin ser movida.
Una cadena
no se puede colgar sin fijar el primer anillo; si uno quisiera au-mentar el
número de los anillos indefinidamente, siempre se necesitaría que uno de los
anillos estuviera fijo. Si no, cayese toda la cadena.
Así
debemos decir, que para explicar el movimiento en el Universo no basta admitir
una serie indefinida de causas intermedias. Debe haber una causa primera, tan
absoluta y perfecta que ya no necesite otra causa para mover, sino que mueve a
las otras cosas por sí misma.
Este Ser,
que es la causa primera y absoluta de todos los movimientos, lo llamamos Dios.
3.
Argumento: Por el Orden y Finalidad en el mundo.
En el
mundo hay un orden y una finalidad admirables.
Pero
siendo’ así que la única causa proporcionada para tal orden y finalidad es un
ser espiritual y omnipotente:
Luego debe
existir tal ser espiritual, que llamamos Dios.
Explicando
brevemente estas proposiciones vemos que:
En el mundo
hay orden y finalidad. Los astros recorren sus órbitas con precisión
matemática. Las plantas y los animales se desarrollan según normas
admirablemente sabias. Todos los inventos de la tan celebrada técnica moderna
no son sino débiles imitaciones de las maravillas de la Naturaleza.
Hasta
podemos afirmar que todas las ciencias naturales: astronomía, física, química,
botánica, biología no son otra cosa que el afán humano de conocer las leyes
misteriosas y la maravillosa tendencia de los seres, para conservar su
existen-cia y garantizar la propagación de la especie. Basta pensar en el
cuerpo humano y sus órganos.
La única
causa proporcionada para eso es la existencia de un ser espiritual sumamente
poderoso e inteligente. La razón es obvia. Porque ordenar significa distribuir
las cosas según un plan premeditado. Finalidad o tendencia hacia un fin
significa la aplicación de medios adecuados para la realización de un objeto
ideado. P. ej., los órganos en las plantas y en los animales son medios para la
conservación del individuo o para la generación de otros de la misma especie.
Tal orden
y finalidad supone un ser espiritual, porque premeditar un plan (orden) e idear
un objeto y buscar y aplicar los medios (finalidad) son actos cognoscitivos y
por eso inmateriales, propios de un ser espiritual.
Tomando
ahora en cuenta la estupenda grandiosidad del orden y finalidad del mundo, cuya
realización supone una fuerza fantástica, debemos concluir :
El orden y
finalidad del mundo suponen como causa un ser espiritual suma-mente poderoso e
inteligente. Este Ser espiritual lo llamamos Dios.
B. LOS
ARGUMENTOS PSICOLÓGICOS
En el alma
humana encontramos :
1) Una ley
absoluta de 'obrar el bien.
2) Una
exigencia absoluta de que triunfe el bien.
8) Un
anhelo absoluto de poseer el bien.
Según eso
se nos presentan 3 pruebas de la existencia de Dios.
1.
Argumento: Por la ley de la conciencia.
El
hombre,' desde que su razón despierta, siente en su alma la ley absoluta de
obrar el bien y evitar el mal. Esta exigencia no se manifiesta como consejo o
de vez en cuando. Se presenta como obligación absoluta, como deber que siempre
ha de cumplirse.
No hay ley
sin legislador. El legislador, en el caso de la ley de la conciencia, no puede
ser el hombre mismo, que haya dado tal ley. La encuentra ya en sí en cuanto
despierta la razón. Ni puede ser el pedagogo el legislador, pues, también loo
salvajes y los niños totalmente abandonados ' y sin educación, todos conocen
esa voz misteriosa de la ley en su interior.
Además, si
fuera ley de los hombres, no podría imponerse con esa fuerza absoluta e
inalterable.
Luego
debemos admitir:.Esa ley viene de un legislador supremo, que la imprimió en la
misma naturaleza humana. A ese Legislador Supremo lo llamamos Dios.
2.
Argumento: Por la exigencia de una justicia perfecta.
En el alma
humana hay la exigencia absoluta de que triunfe el bien, de que se haga
justicia perfecta. Se rebela contra la idea de que el mal triunfe sobre el
bien; reclama justicia.
Pero se
sabe que en esta tierra y en esta vida en raros casos se alcanza justicia
perfecta. Cuántos buenos sufren, mientras tantos malhechores pasan la vida
gozando y triunfando.
Por eso
debe haber un juez supremo y justísimo, que conozca toda la bondad y toda la
malicia de los actos, y tenga a la vez el poder de hacer justicia perfecta.
Sólo él pudo imprimir en nuestra alma esta misma exigencia absoluta. A ese Juez
Supremo lo llamamos Dios.
3.
Argumento: Por el anhelo absoluto de felicidad perfecta.
Todo ser
humano siente en lo más hondo de su alma el anhelo y deseo de una felicidad
perfecta. Y ningún grado de felicidad le deja contento, siempre quiere más,
anhelando el bien perfecto. Tampoco puede contentarse con poseerlo por un lapso
de tiempo, lo quiere para siempre. Pero nadie niega que tal felicidad perfecta
no se alcanza jamás en esta tierra y durante esta vida. Por eso nos queda la
alternativa siguiente: O nuestra naturaleza humana, – este milagro de poder y
sabiduría – se reduce a mera falsedad y engaño, o existe un ser que nos
imprimió ese anhelo y quiere cumplirlo perfectamente después de esta vida,
dando a los hombres que así lo merecen, el sumo bien por .toda la eternidad.
Claro
está, no cabe más que admitir esta segunda parte de la alternativa: Existe tal
Ser Perfecto y Eterno para satisfacer el anhelo humano de felicidad. A ese Ser
lo llamamos Dios.
A esos
tres argumentos los podemos proponer también juntos del modo siguiente :
El hombre
alcanza su destino y perfección naturales únicamente mediante el perfecto
cumplimiento :
1) De la
ley absoluta de obrar el bien.
2)' De la
exigencia absoluta de que triunfe el bien.
3) Del
anhelo absoluto de poseer el bien.
De otra
manera habría que admitir la conclusión absurda de que la naturaleza no
ten-dría sentido y sería falsa. No queda, pues, otra solución para el hombre
sensato que admitir la existencia de un Ser, capaz de llevar la naturaleza
humana a su cumplimiento natural. Es-te Ser lo llamamos Dios.
2. LA NATURALEZA DE DIOS
Los
argumentos precedentes nos han demostrado que existe Dios. A la vez hemos
llegado a saber algo más sobre Dios; pues el que da vida, es un ser vivo. El
que impone orden y finalidad, es un ser espiritual. El motor del Universo debe
tener la fuerza de mover, no de otro ser sino por sí mismo.
Ahora
vamos a aclarar más estos puntos para llegar a una idea más clara de lo que es
Dios.
1.
Definición de la naturaleza en general.
Naturaleza
en general es lo que queremos saber al preguntar : ¿Qué es'?, es decir, lo que
expresamos por la definición de una cosa. P. ej., al preguntar: ¿Qué es el
hombre? se nos contesta: El hombre es un animal racional. Así “animal racional”
es la naturaleza del hombre.
2. La
Naturaleza de Diosa.
A la
pregunta : ¿Quién es Dios? podemos contestar : Dios es el Ser Supremo Espíritu
infinitamente perfecto, creador y conservador del Universo.
Espíritu
es un ser con entendimiento y voluntad, pero sin cuerpo. Dios, los Ángeles y
nuestra alma son espíritus.
Supremo es
el espíritu que es superior a todos los seres.
Perfecto
es aquello al que no falta nada.
Infinitamente
perfecto es el que posee todas las perfecciones en sumo grado.
Crear
significa: sacar de donde no hay nada por la mera voluntad.
Creador es
Dios por cuanto Él ha sacado de nada todo cuanto existe.
Al
principio existía Dios y nada ni radie fuera de Él. Conservador es Dios porque
Él hace, por su voluntad, que lo que existe, siga existiendo. Sin la voluntad
conservadora de Dios, el Universo se volvería nada.
3. LOS ATRIBUTOS DE DIOS
Un
conocimiento perfecto completo de Dios no podemos conseguirlo jamás. No lo
podemos comprender. Comprender, pues, significa “conocer completamente”.
Pero nuestro entendimiento finito no puede comprender o abarcar a; Dios, que es
un ser infinito. Ni siquiera podemos comprender y abarcar con nuestro
entendimiento el Universo creado y finito. El mismo firmamento con sus millones
de mundos gigantescos que se mueven con velocidades fantásticas y en distancias
fabulosas, nos parece un manto con puntos luminosos; porque somos in-capaces de
captar y abarcar con nuestro conocimiento esas partes del Universo. Mucho menos
conocemos perfectamente a Dios. Sólo Dios se conoce perfectamente a sí mismo.
Pero,
aunque no podemos comprender a Dios, podemos sí saber y conocer mucho acerca de
Dios, sobre todo por medio del estudio de los llamados atributos de Dios.
Atributos
de Dios son las perfecciones esenciales de la Naturaleza divina.
Si
distinguimos en Dios atributos, hay que recordar que esos atributos no son
distintos de Dios mismo. Dios no tiene vida y sabiduría, sino que es la vida y
sabiduría misma. El mismo rayo solar al fraccionarse aparece como otros tantos
rayos de distintos colores, así al ocuparnos de la Naturaleza simple de Dios,
nos aparece según nuestra manera de ver, como compuesta de muchas cualidades o
atributos. Únicamente así podemos captar un poquito de su infinita perfección.
División
de los Atributos de Dios. – Según los diferentes puntos de vista que empleamos,
encontramos en Dios diversas clases de atributos.
1.
Atributos positivos y negativos.
Si una
perfección de las criaturas, por ej. ciencia, se afirma en grado sumo de Dios,
entonces tenemos un atributo positivo. En ese caso : omniciencia.
Si negamos
de Dios una imperfección de las creaturas, por ej. ser finito, entonces tenemos
un atributo negativo de Dios : ser infinito. En realidad, esos atributos
divinos negativos expresan también verdaderas perfecciones divinas: in-finitud
es plenitud de ser.
2.
Atributos absolutos y relativos.
Absolutos
son los que tiene Dios en sí nudismo, sin relación con las creaturas, por ej.
bondad: Dios es bondadoso con nosotros.
3.
Atributos de la Naturaleza divina y de la Vida divina.
Atributos
de la naturaleza divina son los que nos hacen conocer la misma Naturaleza de
Dios, los otros nos hacen conocer mejor la vida y actividad de Dios.
Bajo este
punto de vista vamos a desarrollar los atributos divinos.
A) Atributos
de la Naturaleza Divina.
1) La
Aseidad consiste en que Dios existe por sí mismo (“ a se” es en las “por sí”).
Los argumentos nos han llevado a Dios Como causa primera, no causa-da por
ninguna otra. Debe su existencia sólo a sí mismo. ’
2) La
Unidad consiste en que no hay más que un solo Dios. Pues, no puede haber más
que un solo ser perfectísimo. Si hubiera más, ninguno tendría la perfección
suma. El Politeísmo es un absurdo.
3) La
Simplicidad consiste en que Dios carece de partes. Dios es espíritu; sólo la
materia tiene partes, susceptibles de división y por eso de descomposición.
Luego, no hay división ni descomposición de Dios.
4) La
Inmutabilidad consiste en que Dios está exento de toda mudanza. Se sigue
necesariamente de su simplicidad. Lo que es y hace Dios, lo es y hace
eternamente. Cualquier cambio aumentaría o disminuiría sus perfecciones. Tal
cosa es imposible en el Ser perfectísimo.
5) La
Espiritualidad consiste en que Dios tiene entendimiento y voluntad; pero no
tiene cuerpo. No hay nada de material en Él. – La Sagrada Escritura hablando de
los ojos o de las manos de Dios, sólo se acomoda a nuestra manera de hablar.
Pero de ningún modo quiere afirmar que Dios de veras tiene un cuerpo humano.
6) La
Eternidad consiste en que Dios no tiene principio ni fin. Existía, existe y
existirá siempre. Para Dios todo es presente. Todo lo pasado, presente y futuro
lo abarca su mirada y vive su conciencia como un solo instante.
7) La
Inmensidad de Dios consiste en que Dios no tiene límites; Como para Él por su
eternidad no hay tiempo, así por su inmensidad no hay espacio. Como está
presente a cada momento del tiempo, así está presente en todo lugar.
8) La
Personalidad consiste en que Dios es un ser espiritual, que tiene entendimiento
y voluntad, conciencia de sí mismo y goza de perfecta autonomía.
Como Dios
ha creado personalidades, (Ángeles y hombres), debe El mismo como causa
proporcionada poseer esta perfección.
B) Atributos
de la Vida Divina.
La Vida
Divina, como es vida de espíritu, se manifiesta por su actividad cognoscitiva y
volitiva.
a)
Atributos del Conocimiento Divino.
1)
Omnisciencia consiste en que Dios lo sabe todo, lo pasado, lo presente y lo
futuro, y también los pensamientos más recónditos, hasta sabe lo que van a
hacer los seres libres, sin que Dios obligue la voluntad de los seres libres.
Por ej.
sabía Dios
la traición de Judas. Pero no es que Judas traicionó por saberlo Dios; sino
Dios lo sabía porque conocía perfectamente la libre voluntad de Judas.
2)
Veracidad consiste en que Dios no puede equivocarse ni engañar. Es su
inteligencia tan perfecta que todo le está presente en la plena luz de la
verdad.
3)
Sabiduría consiste en que Dios todo lo sabe gobernar y dirigir hacia el fin que
Él ha destinado y según los planes que Él ha dispuesto. Aunque parezca a veces
como si los planes de Dios no se llevasen a cabo, en el fondo y al fin se
cumple perfectamente la voluntad de Dios en el Universo y en la vida de los
hombres.
b) Atributos
de la voluntad divina.
1) La
Omnipotencia consiste en que Dios por un mero acto de su voluntad puede
realizar cuanto su inteligencia puede idear como factible. Cosas
contradictorias o moralmente malas repugnan a Dios como Ser perfectísimo. No
puede hacerlas, pues el poder hacerlas es una imperfección que no cabe en Dios.
2) La
Santidad consiste en que la Voluntad de Dios se dirige con sumo amor al bien y
con sumo odio al mal. Como El mismo es el sumo bien y la suma de toda perfección,
se ama a sí mismo con sumo amor; y, por consiguiente, está en oposición
absoluta a cuanto es malo. En El no cabe ni sombra de pecado.
Por su
Santidad Dios quiere en sus criaturas lo bueno 'y aborrece lo malo. Por eso,
fiel a sus promesas y amenazas, premia el bien y castiga el mal según lo
merecido.
4 EL ATEISMO
1. Definición literal. - Ateo significa
"sin Dios". La palabra se deriva del griego a = sin, theos = Dios.
2. Definición real. - Ateismo es la doctrina
que niega la existencia de Dios.
Está probado
rigurosamente que no hay pueblo ni tribu, por salvaje que sea, donde no se
tenga a lo menos la idea de Dios. Ateos en el sentido de que no tengan idea de
Dios, no hay.
Pero, sí hay y habrá
siempre quienes por motivos que explicaremos adelante, niegan la existencia de
Dios, y buscan para ello una base teórica o doctrinal. Son ateos teóricos.
Hay otros que no niegan
directamente la existencia de Dios, pero viven como si no hubiera Dios>
Prescinden de Él en su vida práctica, son los llamados ateos prácticos.
3. CAUSAS DEL ATEISMO
Si todos los hombres
tienen a lo menos idea de Dios, ¿cómo es posible que haya quienes niegan su
existencia?
Las causas principales
son las siguientes:
a) El placer. - Para los hombres sedientos de
placeres, Dios es un estorbo. Él da mandamientos que se oponen a las malas
inclinaciones. El que amenaza con castigos los placeres pecaminosos, va a ser
un día Juez omnisciente y justísimo. Pero tal Dios no les conviene a los
inmorales y cobardes. Por eso lo niegan, -tratan, pues, de convencerse a sí
mismos, y acaso a los demás, de que Dios no existe, aunque en el fondo creen
firmemente en su existencia.
b) La soberbia. - La fe exige la humildad y
disposición de aceptar verdades reveladas por Dios y que no puede encontrar el
hombre por sí mismo. Entre los modernos hay quienes se jactan de ser autónomos,
que quieren confiar sólo en su razón, no en la autoridad ajena. Rechazan lo
que no han encontrado ellos mismos por su trabajo intelectual. Y por esa razón
rechazan la religión y la le en Dios.
c) El ambiente social. - No puede negarse que
existe un grave desequilibrio en el orden social de los tiempos actuales.. Las
riquezas del mundo se juntan más y más en manos de unos pocos, mientras la
pobreza de las masas se vuelve más y más una verdadera miseria. Hay quienes
creen que de este estado de cosas tiene la culpa la Religión; por lo cual
combatiendo a esta, como causa de la miseria, rechazan también la idea de Dios.
d) La indiferencia. -- Hay siempre indiferentes
que no se toman el trabajo de pensar más allá de las cosas que perciben sus
sentidos. Todo cuanto existe más allá de su experiencia, no existe para ellos.
Como Dios no es cognoscible por los sentidos humanos, por la experiencia
sensitiva, por esa razón lo niegan sencillamente.
4. CONSECUENCIAS DEL ATEISMO
a) En el
orden intelectual. - Dios es la absoluta verdad. La última cansa explica los
fenómenos de la vida. El Ateismo negando a Dios, niega la Verdad absoluta,
niega la última causa del mundo y de la vida. Buscando entonces explicaciones
del mundo y de la vida fuera de Dios, y prescindiendo de su existencia, -debe
llegar, y efectivamente llega, a incontables errores, a veces groseros, a veces
ridículos.
b) En el
orden moral. - Los hombres que niegan a Dios, que no reconocen su autoridad
divina, y la ley eterna de Dios, tales hombres al fin y al tabú se guían por el
egoísmo y sus instintos. La consecuencia es el salvajismo y la brutalidad, la
tiranía y la anarquía.
La humanidad actual
padece las terribles consecuencias del Ateísmo.
c) En la formación del carácter. - El Ateismo quita al hombre cualquier
ideal y lo hace deslizarse más y más hacia el nivel bajo del hombre materializado
y embrutecido. El que ya no hace caso de la verdad, la justicia y la felicidad
verdaderas, el que no tiene fe en Dios, a ese le falta el empuje ideal, el
concepto de lo noble. En una palabra se le apagaron las estrellas, para él no
hay más que materia y placer.
5. REFUTACIÓN DEL
ATEISMO
a) El Ateismo teórico ya está
refutado por las pruebas de la existencia de Dios. La fuerza de los argumentos
obliga al hombre sincero a reconocer que Dios en verdad existe.
b) El Ateismo práctico no se puede
refutar por la sencilla razón que sus adeptos no quieren escuchar, no quieren
conocer la verdad. Tendrían pues, que cambiar de vida, ajustando sus costumbres
a las verdades que se derivan de la existencia de Dios. Eso es lo que no
quieren. De modo que no hay dificultad de parte del intelecto, sino de parte de
la voluntad. Al respecto, dijo un día Veulillot, dirigiéndose a sus
contemporáneos: "hombres, tened el valor de vivir castos, y tendréis el
valor de ser cristianos". - Que no son sinceros los llamados ateos eso lo
afirma también San Pablo, hombre (le cultura amplia, instruido en la sabiduría
de los Judíos, Griegos y Romanos, que había viajado mucho y que conocía mejor
que nadie a los hombres. Escribe de los Ateos: "Tienen aprisionada
injustamente la verdad de Dios: puesto que ellos han conocido claramente lo que
se puede conocer de Dios; porque Dios se lo ha manifestado. Y así tales hombres
no tienen disculpa". (Ro. 1, 18 ss.).
Una forma en los tiempos modernos
más divulgada del Ateísmo, es el Panteísmo. Afirma que todo (Pan) es Dios y que
la materia del Universo es parte de Dios. Poniendo al Universo el nombre de
Dios, niega efectivamente a Dios, que es un Ser, no material, sino espiritual y
personal. Tratando de los atributos de Dios, ya hemos refutado el Panteísmo,
probando que Dios es un Ser Simple, Espiritual y Personal.
II
EL MUNDO
1.-EL ORIGEN DEL MUNDO
Por la palabra "inundo"
entendemos en este capítulo la totalidad de los cuerpos materiales existentes
en todo el Universo.
La Iglesia afirma que el mundo ha
sido creado por Dios.
Desde el punto de vista de la razón.
que es nuestro punto de vista en la Apologética, las siguientes proposiciones
tienen sus defensores. Examinando estas pro-posiciones, llegamos a la
conclusión de que lo que afirma la fe sobre el origen del mundo, es la única
posición explicable para la razón.
a) El mundo es eterno y existe por
sí mismo;
b) El mundo es Emanación o evolución
de Dios: idéntico con Dios.
c) El mundo ha sido creado por Dios.
1) Refutación de las dos primeras
Proposiciones.
a) Si el mundo es eterno, y existe
por sí mismo, entonces hay dos seres eternos, existentes por sí mismos: Dios y
el mundo. Esa suposición se llama
Dualismo.
La razón se opone al Dualismo. Pues
ya se ha probado que Dios es el Ser no solo eterno, sino también Necesario y
Uno. Claro está que al lado de este Ser Uno no cabe otro igualmente eterno y
necesario.
b)
Refutado por la razón el Dualismo, se levanta el Monismo (monos es uno solo)
declarando que no existen Dios y el mundo como dos principios uno al lado de
otro, sino que existe. el mundo como emanación o evolución de la misma la
divina, de modo que se sigue que el mundo se identifica con Dios. Con eso los
Monistas se revelan a la vez Panteístas.
El sistema está refutado con el
Panteísmo en la parte anterior. Añadimos, la emanación supone en Dios
composición de partes, contradiciendo de ese modo el concepto de Dios, que es
Ser espiritual y simple.
2) Confirmación de la tercera
Proposición.
Dualismo y Monismo no han podido
explicar el origen del mundo. No queda ahora otra posibilidad que la de admitir
como tesis única verdadera y razonable: El mundo ha sido creado por Dios.
Crear significa: "Sacar de
donde no existe nada por mera voluntad". No es posible que un ser creado,
cree otro ser. Podemos si, dar otra forma ser ya existente, pero jamás la
existencia.
Sólo el Ser absoluto que es tan
perfecto que existe por si mismo, El sólo puede crear a seres todavía no
existentes, la existencia. Y como queda excluido el modo dar la
existencia por emanación o evolución, no hay otra manera que la de creación.
3) ¿Por qué Dios ha creado?
Dios como Ser perfectísimo no
necesitaba de otros seres, ni de crear el o. Los ha creado por su mera bondad y
para su mayor honra y gloria.
2.-EL ORIGEN DE LA VIDA
La Iglesia afirma que la vida fue
creada por Dios. Esta verdad está en perfecto acuerdo con lo que dice al
respecto la razón
Analizando las siguientes
Proposiciones que tienen sus defensores, nuestra esta coincide con la de la fe.
a)
La vida ha existido siempre en el mundo.
b) La vida fue producida de la materia por la
llamada generación espontánea.
c) La vida
fue creada por Dios.
Refutación de las dos primeras Proposiciones.
a)
Esta tesis -está debidamente refutada por el argumento que prueba la
existencia de Dios por el origen de la vida.
Resumiendo brevemente lo ya
explicado,. tenemos:
Nadie sostiene que la vida haya
existido siempre en el mundo. Como todo el Universo ha pasado por un tiempo de
incandescencia, no era posible la existencia de un germen vital en este mundo.
Luego, la vida no ha existido siempre en mundo.
b)
Los que sostienen la Generación espontánea, pretenden que la vida de la
materia inorgánica, sin gérmenes preexistentes.
Aspecto histórico.
La posibilidad de la generación
espontánea fue aceptada en la Antigüedad y también en la Edad Media, sin
aplicarla al origen de la vida en el mundo. Pues por ej. la aparición de
gusanos en un cadáver, creían que en la materia descompuesta y bajo el influjo
del sol germinaban tales animalitos; no tenían cimientos científicos a este
respecto.
En los tiempos modernos los
Materialistas aceptaban ávidamente la Generación espontánea, para librarse de
la necesidad de admitir la existencia de Dios.
Refutación
a)
Los experimentos de Pasteur (muerto en 1895) han demostrado que ay
generación espontánea.
Llegó a probar que el aire contiene
infinidad de gérmenes que encontrando ambiente favorable se desarrollan. Puso
él de manifiesto que, después de eliminados todos los gérmenes, no se podía
observar ya el desarrollo de la vida.
Tomó dos
vasos con el mismo contenido. Cerró un vaso herméticamente y expuso ambos a un
calor suficiente para matar cualquier germen. Observó entonces por algún tiempo
lo dos vasos. Después de algunos días, el vaso ex puesto al contacto del aire
se llenó de gérmenes que hicieron descomponerse el contenido mientras el contenido
del segundo vaso quede idéntico. - La
ciencia tenía que reconocer los experimentos de Pasteur como exactos, de modo
que' hoy ya no admite la ciencia la generación espontánea.
a)
Añadamos que desde el punto filosófico, es obvio que ni hay ni jamás barba
generación espontánea. Pues, nadie da - lo que no tiene. Ahora bien: la vida
tiene mucho más perfecciones que la materia le es esencialmente superior. Luego,
la' materia inferior no puede producir la vida superior a ella.
3)
Confirmación de la tercera Proposición.
La
confirmación es ahora muy fácil. Ya no cabe más explicación del origen de la
vida que ésta: La vida fue creada por Dios.
3.-EL ORIGEN DE LAS ESPECIES
La Iglesia
deja la explicación del ,origen 'de las especies a la 'investigación científica,
siempre que los resultados de la ciencia no sean contrarios al dogma de la
Creación. Pues, en tal caso, el resultado con toda, seguridad seria falso.
Dos
Proposiciones tienen sus defensores.
a) Las
especies han procedido una de - otra por medio de evolución.
b) Las
especies han sido creadas por Dios, sea directa, sea indirectamente.
1)
Refutación de la primera Proposición.
,
a)
El Evolucionismo o Transformismo materialista es defensor de esa tesis.
Presenta su doctrina bajo las formas del Darwinismo y del Lamarckismo.
El
Darwinismo (Darwin 1809-82) considera como causa de la evolución de nuevas
especies la llamada 'Selección -natural". Dice que la Naturaleza ,produce
más individuos de-los que puede - sustentar ; de lo que sigue la lucha por la
vida. Sucumben:, los más débiles y sobreviven los más fuertes, que por la misma
lucha desarrollan más y más sus órganos y cualidades, produciéndose así nuevas
y superiores especies.
El
Lamarckismo (Lamarck 1744-1829) explica las transformaciones por los factores
del medio (clima; temperatura y alimentos) que cambian y obligan a los
organismos a adaptarse, y-, por la herencia, que. trasmite y en largas épocas
robustece los nuevos órganos.
Al
Evolucionismo de Darwin y Lamarck se opone:
1) La
Paleontología (ciencia de los animales
prehistóricos). Los Evolucionistas se valen de ella, diciendo: Las especies
ant eri ores difieren mucho, según in-
-dican los' fósiles, de las actuales, lo que supone una evolución.
Pero, la Paleontología seria hace
constatar que no -se ha descubierto ningún miembro de transición, que deberían
ser numerosísimos.
2) La
Anatomía declara que las decantadas semejanzas entre representantes de
diversas especies, existen sólo para la observación superficial. Las
diferencias verdaderas obligan a admitir que el 'paso de una especie a otra es
imposible.
3) La
Biología pone de relieve que la infecundidad entre especies que por otro lado
nos parecen muy semejantes, es un hecho comprobado. Este hecho seria
inexplicable si hubiera 'transición tan fácil entre las diferentes especies.
Hoy
tampoco se admite como prueba los órganos llamados rudimentarios. Tienen sus
funciones dentro del organismo, y ya conocemos astas funcionas para muchos de
ellos. -
2)
Confirmación de la segunda Proposición.
El
Creacionismo es la doctrina que
defiende que las especies han sido
creadas por Dios, - sea directa, sea indirectamente. Después de rechazar al
Evolucionismo con sus explicaciones, no le cabe a la razón más sino que
admitir esa tesis del Creacionismo.
La creación directa de especies en
que Dios ha creado cada especie directamente, de modo que cada una es fija y
permanente, sin modificación esencial o transformación.
Creación
indirecta de las especies quiere decir, que Dios creó una o pocas especies
primitivas, dándoles a ellas fuerzas y cualidades tales que según el tiempo o
la variedad del ambiente, se desarrollasen hasta producir otras y nuevas especies
La
creación indirecta es admisible y no contradice en nada a la doctrina de la
Iglesia. Es bien difícil el determinar algo sobre el número de las formas primitivas.
Con todo sería probable, que coincida con el número de las grandes familias en
el reino vegetal y animal. '
Conclusiones.
No podemos admitir, ni por la fe ni por la ciencia, al
Evolucionismo materia lista que se basa
en la eternidad de la materia, la generación espontánea y en el Trasformismo de
Darwin y Lamarck.
Ni la fe ni la ciencia se oponen que uno admita la hipótesis
de una evolución mitigada, en el sentido de que:
a) Dios ha
creado el mundo con las leyes que determinan su desarrollo.
b) Dios ha creado la vida, dotándola de fuerzas para seguir
su desarrollo.
c) - Dios ha creado al alma humana que de ninguna manera
tuvo por origen la evolución ni
transformación alguna.
En
tal "Evolucionismo mitigado" brilla tanto más la inteligencia y
sabiduría y potestad de Dios.
III
EL HOMBRE
Hemos probado' que existe Dios. Fuera de Él existe, además,
el Universo, creado por Dios, de ninguna manera idéntico con Él.
Dios es espíritu ; espíritu perfecto y purísimo. No hay en
Él nada material. Es superior a todo lo que significa' materia.
El Universo es el conjunto de seres materiales o corpóreos:
Deben su existencia a Dios y se rigen por las leyes que Él les impuso.
Dios es espíritu; el mundo es materia. Pero en el mundo
existe otro ser, que es a la vez espíritu y materia: el hombre. Está colocado
por decirlo así, entre Dios y el mundo. Es superior a la materia que domina por
sus fuerzas espirituales, pero inferior a Dios y subordinado a Él.
Estudiemos ahora al hombre más detenidamente.
1) La naturaleza del hombre.
Definición:
El hombre es un animal racional.
a) El
hombre es animal. Tiene el hombre un cuerpo, que es un organismo
maravillosamente organizado.
También en su vida sensitiva y en sus funciones biológicas es semejante
a los animales.
b) El hombre es racional. Pero
fuera de la actividad de sus sentidos, observamos en el hombre fenómenos que no
se manifiestan en los animales. El hombre piensa, juzga, discierne entre lo
verdadero y lo' falso, entre lo bueno y lo malo. Tales operaciones tenemos que
atribuirlas a un principio que es superior a lo que encontramos en los demás
animales. Ese principio lo llamamos razón. Con lo cual está demostrado que el
hombre es un animal racional;'
La razón, por ser, una facultad' inmaterial, necesariamente
supone como base una sustancia inmaterial o espiritual en la cual se funda. Así
lo requiere el principio filosófico que dice: en la forma de obrar se
manifiesta la naturaleza de la sustancia que opera. Esta sustancia espiritual
en el hombre la llamamos alma.
Luego
podemos decir, que el hombre es un animal racional, compuesto de cuerpo y alma.
2.-ALMA HUMANA
La fe nos enseña que el alma humana
es una sustancia espiritual o espíritu, dotado de libertad e inmortalidad.
Nuestra razón afirma lo mismo,
aunque hoy más que nunca hemos de defender estas verdades contra los
Materialistas, Panteístas y Neopaganos.
Por eso probemos brevemente la
existencia del alma humana, su espiritualidad, su libertad e inmortalidad.
1. La existencia del alma. Se
prueba:
Observamos en el hombre operaciones
quo no tienen los seres materiales, tales como juzgar, raciocinar, etc.
Una simple reflexión basta para
convencernos de que tales fenómenos son del todo superiores a los que se
producen en y por la materia. A la vez demuestra el principio de causalidad que
la causa debe ser proporcionada al efecto.
Luego, tales operaciones deben tener
como base un ser inmaterial o espiritual del cual proceden. Este ser o
sustancia espiritual en el hombre, la llamamos alma. (Véase el número
anterior). Existe pues el alma humana.
2. La espiritualidad del alma. Se
prueba:
a) Por el acto del conocimiento intelectual.
Somos capaces de conocer. Pe-
re conocer significa captar un objeto de tal manera que,
aunque existe fuera de nosotros, a la vez exista de un modo inmaterial dentro
de nosotros. Hasta podemos captar por nuestra facultad cognoscitiva seres o
cosas inmateriales, como Dios, la verdad, la virtud, la justicia. En este poder
del alma se basa también el lenguaje, la religión, el progreso moral y
científico.
Todos esos actos del entendimiento
son tales que por su misma esencia (captar lo inmaterial) excluye un principio
material.
Luego, el alma, para ser capaz de
conocer, debe ser una sustancia espiritual.
b) Por el acto
reflexivo. No solamente pensamos, hasta podemos pensar sobre nuestros
pensamientos. Cuando nuestro pensamiento vuelve sobre sí mismo, es lo que
llamamos reflexión.
Esa acción está absolutamente por
encima de cualquier acción material, que es necesariamente caracterizada por la
función de sus partes. Por ej. : un papel al doblarse siempre se dobla una
parte del papel sobre la otra parte, jamás el papel entero puede doblarse
sobre sí mismo.
Así la materia, por ser materia, es
decir, por tener partes, nunca será capaz de un acto reflexivo, en el cual todo
el pensamiento se vuelve enteramente sobre sí mismo.
Luego, el acto reflexivo, que
continuamente realiza nuestra alma, no se puede explicar sin admitir la
espiritualidad del alma.
3. La libertad del alma.
Definición. La libertad consiste en
que el hombre determina a sí mismo a obrar, a hacer eso o aquello, a proceder
de esa manera o de otra. Libre es el hombre que puede elegir entre diferentes
posibilidades de actuar.
La libertad incluye, pues, dos
elementos;
a) Libertad exterior, o sea ausencia de coacción física.
b) Libertad interior, o sea la facultad de determinarse a sí
mismo sin necesidad interior.
Se prueba:
a) Por la Conciencia. Tenemos clara conciencia de que hay en
nuestra vi-da dos clases de actos, actos libres y actos necesarios. Los actos
libres dependen de nuestro entendimiento y voluntad, y son por eso actos
personales, (por ej. : leer, escribir). Los actos necesarios son independientes
de nuestro entendimiento y voluntad y por eso impersonales, (p. e. : el
respirar, el latir del corazón).
Nuestra
conciencia no podría hacer esta diferencia entre las dos clases de actos>
si no se diera perfectamente cuenta que es el hombre mismo que por su propia
voluntad se determina libremente a realizar los actos personales o libres, que
exclusivamente dependen de su autodeterminación.
b) Por el
sentimiento de la responsabilidad.
Tenemos
impreso en nuestro ser el sentimiento de la responsabilidad, es decir, la
obligación absoluta de "responder" por ciertos actos personales. No
de cualquier acto nuestro, sino únicamente de los actos que juzgamos bien
nuestros por haberlos hecho con libertad. Así notamos bien la diferencia entre
el matar a un hombre con deliberación y el matar a un hombre en un accidente, a
pesar del cuidado y la atención.
c) Por el
sentimiento de la culpabilidad y del arrepentimiento.
Sin
libertad verdadera sería inexplicable el sentimiento de la culpabilidad y del
arrepentimiento. ¿Cómo podríamos arrepentirnos de veras y considerarnos
culpables de una cosa que ha pasado sin nuestra voluntad? Un sonámbulo que
provoca un incendio no es culpable ni puede arrepentirse de veras.
d) Por el sentimiento de justicia.
En todo el mundo existen las instituciones de justicia :
tribunales, policía, cárceles. Todos lo aprobamos. Esa convicción del género
humano de que debe hacerse justicia, no podría existir si no hubiera en los
actuantes la libertad que los hace merecedores del castigo.
4.-LA INMORTALIDAD HUMANA
Definición: La inmortalidad consiste en que un ser viviente
es incapaz de la corrupción que causa la muerte.
Hay tres clases de inmortalidad :
a) Inmortalidad
absoluta es la que tiene únicamente Dios.
b) Inmortalidad
natural es la que tiene un ser, cuya naturaleza carece de elementos
corruptibles.
e) Inmortalidad Gratuita es la que
Dios da a un ser corruptible. (La tenían nuestros primeros padres antes de
pecar).
Para nuestra alma afirmamos una inmortalidad natural.
Se prueba:
a) Por su incapacidad
de morir.
La muerte
es la destrucción de un ser viviente por la disgregación de sus partes, o por
la destrucción de un elemento esencial para su existencia, (p. ej. : el cuerpo para el alma del bruto).
Pero el
alma humana es un ser espiritual que carece de partes, y por eso es incapaz de
sufrir la disgregación de ellas Tampoco depende esencialmente del cuerpo como
el alma de los brutos. Puede existir sin él por ser sustancia espiritual.
Luego, el
alma no es capaz de morir, es inmortal.
b) Por el anhelo del
hombre de una justicia perfecta.
El alma
con todas sus fuerzas anhela la posesión eterna del bien perfecto, para estar
eternamente feliz.
Este
anhelo y tendencia, fundada en la naturaleza misma del alma, no puede ser mero
ensueño y engaño.
De lo que se sigue: el alma debe ser inmortal. Antes ya se
ha sacado de las mis-mas premisas la conclusión de la existencia de Dios. Con
igual derecho sacamos ahora la conclusión de la inmortalidad del alma.
c) Por el anhelo del hombre de una Justicia
perfecta.
Con fuerzas naturales e innatas el alma reclama la justicia
perfecta. Tal justicia se alcanza rarísimas veces en esta vida mortal.
Debe,
pues, conseguirse en la vida inmortal del alma.
3.-UNIDAD DE CUERPO Y ALMA
La grandeza y excelencia del alma
humana no debe conducirnos a creer que ella es el hombre, y que el cuerpo no es
más que una cosa accidental e insignificante.
El alma está por encima del cuerpo
por su naturaleza espiritual, hasta puede existir sin el cuerpo. Sin embargo,
está por su naturaleza misma ordenada hacia una unión íntima con el cuerpo,
exige esta unión.
El cuerpo, que no es sino materia,
no puede existir sin el alma e igualmente exige y necesita la unión íntima con
ella.
De esta unión íntima del cuerpo y
del alma resulta un nuevo ser, que no es alma ni cuerpo, sino el hombre.
Esa unión entre el cuerpo y el alma
que hace de esos dos elementos (cuerpo y alma) una sola sustancia, un solo
principio de acción que es la persona humana, esa unión, digo, la llamamos
Unión Substancial.
En los actos del hombre el alma y el
cuerpo dependen uno del otro y obran como un solo ser. (Por ej.: Yo pienso y Yo
tengo dolor de cabeza). El alma, por ejemplo, a pesar de su espiritualidad,
depende tanto del cuerpo en sus actos que por enfermedad del cerebro puede
haber deficiencia total o parcial de su actividad. Le acontece entonces al alma
lo que al músico que no puede tocar cuando tiene las manos heridas. El alma
misma nunca puede enfermarse. Todas las llamadas enfermedades mentales son
enfermedades de los órganos corporales que necesita el alma para sus funciones
humanas.
4.-DESTINO DEL HOMBRE
La Fe nos enseña que el destino del
hombre es obrar por la Gloria de Dios aquí en la tierra y hallar de ese modo su
felicidad eterna en el Cielo. Ese es su destino sobrenatural.
La Apologética confirma esa
enseñanza de la fe, al demostrarnos el destino natral del hombre.
Encontramos la confirmación en las
pruebas de la inmortalidad del alma, y además en la tendencia hacia la vida
eterna, la felicidad verdadera y la justicia perfecta. El único destino, digno
del hombre, inteligente, libre e inmortal, no puede ser sino Dios.
5.-ORIGEN DEL HOMBRE.
Una vez explicada la naturaleza del
hombre, nos preguntamos: ¿A quién debe el hombre su origen?
Ya se ha contestado de un modo
general mediante los argumentos que han demostrado que todos los seres
vivientes deben su origen al acto creador de Dios. De esa manera ya sabemos que
el hombre fue creado por Dios.
Preguntamos ahora: ¿Esta creación
fue directa o indirecta? De creación directa se trataría, si Dios hubiese
creado al hombre por un acto directo, sin que el alma ni el cuerpo del hombre
hayan pasado por ciertas fases de la evolución hasta llegar a la forma actual.
De creación indirecta se podría
hablar si a lo menos el cuerpo humano debía desarrollarse y evolucionarse antes
de unirse con el alma humana.
Los Evolucionistas, fieles a sus
principios, defienden que el hombre es producto de la evolución. Afirman que
desciende del mono, que por selección natural o por el influjo del ambiente
llegó a perfeccionarse hasta alcanzar el uso de la razón.
La fe nos enseña que Dios creó
directamente el cuerpo y el alma del hombre, uniéndolos en el mismo instante.
Esta verdad la atestigua nuestra
razón con absoluta certeza del alma humana y con la mayor probabilidad del
cuerpo humano.
NOTA: La llamada alma de los
animales no es de ninguna manera comparable con el alma humana. Pues no es ser
espiritual. No existe separada del cuerpo sino depende de él enteramente. Es
engendrada con él y perece con él.
a) El alma
humana es creada directamente por Dios.
El alma humana no puede proceder ni
del cuerpo ni del alma de los padres.
No procede de su cuerpo. Pues el
cuerpo es material, mientras el alma es un ser espiritual. Por eso es simple e
indivisible e infinitamente superior a la materia. Por todas esas razones es
imposible que el cuerpo, como principio material, sea la causa proporcionada
del alma que es ser espiritual.
Ni procede del alma. El alma de los
padres no puede engendrar el alma de su hijo. Engendrar es posible únicamente
donde hay separación del ser engendrado del ser engendrante. Como el alma es
simple e indivisible, es incapaz de engendrar por sí misma otra alma.
Luego, hay que admitir, que no queda
otra posibilidad sino la creación directa del alma de Dios.
b) El cuerpo del primer hombre fue
creado por Dios.
Acabamos de demostrar que todos los hombres reciben su alma
de Dios, su cuerpo por la descendencia de sus padres. Queda pues una cuestión
para aclarar: el primer hombre, ¿de dónde recibió su cuerpo?
Hay quienes afirman que todo el
hombre es producto de la evolución y por eso también su cuerpo. Esta teoría ya
está debidamente refutada en la parte anterior.
Hay otros que admiten que el alma
viene de Dios, pero afirman que Dios tomó un cuerpo animal para infundirle el
alma y crear así el hombre.
Aunque algunos disputen si es
compatible esta teoría con la fe católica, especialmente, cuando se admite que
Dios preparó debidamente el cuerpo animal antes de infundirle el alma humana,
debemos decir, que hasta hoy la ciencia no nos trae ningún argumento que nos
obligue a modificar en este sentido el dogma tradicional. La ciencia más bien
aprueba lo que dice la fe: El cuerpo del primer hombre fue creado por-Dios.
Veamos
brevemente lo que dice la ciencia al respecto:
a) Hoy día
la ciencia seria admite que las diferencias entre el cuerpo del animal, también
del mono, y el cuerpo humano son mucho más grandes que sus semejanzas, y que
las semejanzas de ninguna manera demuestran descendencia.
b) Todos también
admiten que en la actualidad ni hay un solo ejemplo dc tal evolución ni un solo
fósil que podría servir con seguridad como puente de transición entre el
animal y el hombre.
c) El
estudio de los fósiles ha mostrado que los restos más antiguos de se-res
humanos (Neandertal, Heidelberg, Moustier, etc.) muestran claramente que se
trata de restos de hombres verdaderos con todas las características del animal
racional. De ninguna manera merecen el nombre de Hombres-Monos.
Luego, queda probado que la misma
ciencia no puede explicar el origen del cuerpo humano por evolución natural y
afirma así indirectamente lo que dice la fe, que el cuerpo humano fue creado
directamente por Dios.
6. -UNIDAD DE LA ESPECIE HUMANA
Unidad significa aquí el mismo
origen, quiere decir que todos los hombres descienden de una sola pareja.
Las diferencias de color, lenguaje,
etc., ha inducido a observadores superficiales a creer que cada raza tenga su
propio origen. Pero aquellas diferencias se explican fácilmente por las diferencias
de ambiente, educación, herencia, etc., que han dejado sus efectos en los
hombres -
Prueba de la unidad de la especie
humana.
Los hechos siguientes prueban
claramente esta unidad:
a) Hay
idéntica estructura anatómica de las diferentes razas.
b) Son
idénticos los fenómenos fisiológicos -
c) Todas
las razas son fecundas entre sí.
d) Todos los hombres tienen idénticas cualidades
intelectuales (piensan, calculan) morales (disciernen el bien del mal) y
religiosas (saben que existe Dios y que han de cumplir su voluntad).
7.-LA PROVIDENCIA DIVINA
La Providencia consiste en que Dios
gobierna paternalmente el mundo y lo encamina sabiamente a su fin por medios
adecuados.
Verdad es que solamente a la luz de
la Revelación del Nuevo Testamento conocemos la extensión de la Providencia
divina y todo el encanto del amor paternal con el cual el Padre celestial se
preocupa de sus obras y en especial de los hombres.
Pero nuestra razón también queda a
veces admirada ante las maravillas de la Providencia Divina.
1)
Pruebas de su existencia.
a) Dios es el Ser Sapientísimo, Imposible es que deje su
obra sin el cuidado paternal y al acaso.
b) El mundo exige la Providencia. Sin el constante acto de
conservación, de gobierno y cuidado, los seres creados recaerían en la nada y
en lugar del admirable orden del Universo, pronto existiría el caos.
c) La misma armonía del Universo, la exactitud con que se
observan las leyes de la naturaleza, son otros tantos testigos de la existencia
de un constante cuidado que ejerce un Ser que se ocupa con interés de la marcha
del Universo.
d) Los mismos fenómenos de nuestra conciencia, base de la
moral individual y social, muestran que hay un gobernador supremo que dirige
el destino del hombre y de la humanidad.
2) La Providencia y el mal.
Existe en el mundo el mal. Su
existencia arguye según los fatalistas (que no admiten la providencia, sino
sólo el destino o la suerte ciega) contra la Providencia. Pero en verdad la
Providencia no puede ser refutada por la existencia del mal.
Para contestar a los fatalistas
distingamos lo siguiente :
a) El mal físico. Las cosas creadas
por ser finitas, son necesariamente imperfectas. Esas imperfecciones redundan
no pocas veces en daño de los hombres, como en enfermedades, catástrofes, etc.
Pero eso es algo natural. Dios lo permite expresamente, para recordarnos las
imperfecciones propias y las del mundo creado. Quiere que no olvidemos nuestro
destino eterno. Al fin y al cabo:
"Todas las cosas contribuyen al bien de los que aman a
Dios". (Rom. 8, 28). Todas, también las llamadas malas.
b) El mal moral. Ese es el único
verdadero mal. Se llama también pecado o vicio. Pero la culpa de ese mal no la
tiene Dios o el mundo creado, sino únicamente el hombre por el abuso de aquel
magnífico don divino que llamamos "libre voluntad". Es un mal, sí,
pero el hombre mismo puede y debe evitarlo.
Es un mal, no solamente en sí y con terribles consecuencias
para la eternidad, es a la vez la fuente principal de todos los desastres y
calamidades que azotan la humanidad. Sin el pecado el hombre y toda la
humanidad vivirían como en un paraíso. La culpa la tiene el hombre.
3) La Providencia y la libertad humana.
La Providencia que todo lo gobierna y dispone en el mundo y
lo encamina sabiamente a su fin, siempre lo hace, como hemos dicho, por medios
adecuados que se adaptan a la naturaleza de las cosas.
Siendo el hombre libre, como ya hemos demostrado, claro está
que Dios respeta y deja intacta la libertad humana.
Ciertamente,
Dios tiene que influir en las criaturas para dirigirlas hacia su fin y lo mismo
vale respecto al hombre. Dios mueve a las creaturas no libres por leyes
rígidas, pero al hombre, que según su naturaleza es libre, lo mueve sin
violentar su libertad y dándole fuerzas para usar bien de su libertad. Hasta, si
el hombre, en lugar de usar su libertad según la voluntad de Dios, abusa de
ella, Dios dispone por su Providencia
las cosas de tal manera, que, a pesar de todo, consigue los fines que se ha
propuesto.
IV
LA RELIGIÓN
1.-LA RELIGIÓN EN GENERAL
1)
Definición literal: Algunos derivan la palabra "religión" del
verbo latín "religare". Eso significa atar, y religión sería nuestra
unión duradera con Dios.
Otros la derivan del verbo
"religare" que significa cumplir con exactitud. Religión sería
entonces el fiel cumplimiento de nuestros deberes para con Dios.
2)
Definición real: Religión es el conocimiento y reconocimiento de un Ser
Supremo.
A esta definición llegan los
científicos después de haber hecho un estudio comparado de todas las Religiones
según sus elementos constitutivos y comunes.
Conocimiento. Nadie puede tener
religión sin tener idea y conocimiento de la existencia de algún Ser Supremo.
Reconocimiento. El hombre no debe
simple y teóricamente admitir la existencia de un Ser Supremo. Para que haya religión
debe considerarlo como su Dueño y Señor al cual debe creer, obedecer y honrar.
De eso se desprenden los elementos
esenciales que debe tener cada religión.
3) Los elementos de la religión.
Toda religión consta de Dogma, Moral y Culto.
a) Dogma es el conjunto de las verdades religiosas que se
admiten firmemente en la religión.
b) Moral es el conjunto de preceptos que han de cumplirse
como ordenados por la autoridad divina.
c) Culto es el conjunto de ceremonias y ritos que han de
practicarse con fines religiosos, sea para honrar a Dios, sea para aplacarle o
pedirle favores.
4)
Clases de religiones. - Distinguimos:
a)
Religión natural que es la Religión que el hombre practica con sus fuerzas
naturales.
b)
Religión sobrenatural que es la Religión que el hombre practica instruido
por Dios mismo.
2. -NECESIDAD DE LA RELIGIÓN
Es absolutamente necesaria la
Religión para el hombre. Lo manifiestan los argumentos siguientes:
1)
Dios como Creador es Dueño y Señor del hombre, y el hombre depende por completo
de Él. Debe, pues, el hombre reconocer prácticamente esa verdad, sometiéndose
voluntariamente a Dios y cumpliendo su voluntad.
2)
La inteligencia humana busca incesantemente la verdad en medio de mil
dudas y misterios de la vida. La verdad no está sino en Dios que es la Verdad
Absoluta. Sólo practicando la Religión el hombre alcanza la verdad.
8)
La voluntad humana tiende al bien perfecto y eterno. Ya sabemos que este
bien no existe sino en Dios, el Bien Absoluto. Sólo en y por la Religión el hombre
puede conseguir ese Bien y gozar de: él en su posesión eterna. Luego necesita
la Religión.
3. -OBLIGACIÓN DE PROFESAR LA RELIGIÓN
Profesar la religión significa
practicarla.
Los mismos argumentos que nos
muestran la necesidad de la religión demuestran también la obligación de
practicarla o profesarla.
4. -EL INDIFERENTISMO
Es la actitud de los que no se preocupan de los deberes
religiosos y lo mismo les es una religión u otra.
Suele manifestarse el Indiferentismo afirmando que la
religión verdadera no se puede conocer, y que todas las religiones son iguales
sin que haya religión que sea necesaria para el hombre.
En concreto es la actitud de los llamados
"librepensadores" que son en gran parte el resultado del
Protestantismo con sus múltiples sectas. Este resultado se ve todos los días
entre: los adeptos (le la Propaganda protestante en los países católicos: no
son católicos ni serán protestantes - son indiferentes.
Se refuta el Indiferentismo por los argumentos que muestran
la necesidad de la Religión, v en especial de la Religión católica, para
salvarse.
5. -DOCTRINA CATÓLICA SOBRE EL ORIGEN DE LA RELIGIÓN
La Iglesia
enseña que al principio la humanidad recibió su primera instrucción religiosa
por revelación divina en el Paraíso. Dios había preparado en la misma naturaleza
humana un terreno apto para recibir la enseñanza religiosa.
Esa doctrina de la Iglesia ha sido ampliamente confirmada
por argumentos científicos.
1) Las
investigaciones de la Etnología moderna
(ciencia de los pueblos) han demostrado que los ciclos culturales
primitivos son monoteístas, creen en un solo Dios, creador, conservador y
Padre. Los ciclos culturales primitivos son aquellos que hasta hoy han
conservado la misma cultura de la humanidad en los principios de su existencia.
Esos importantísimos resultados los debemos a la llamada Ciencia de los Ciclos
Culturales, elaborada por la famosa Escuela Vienesa de Etnología, bajo la
dirección del P. G. Schmidt S. V. D.
2) En todos los
ciclos culturales, también en aquellos que han degenerado en Politeísmo, se
encuentran mitos y leyendas sobre el paraíso, la caída del hombre, el diluvio,
etc. Todo eso no puede explicarse sin admitir una revelación primitiva.
3) Además consta que
la Religión no debe su origen a la evolución o desarrollo de la cultura. Pues
hasta los pueblos más salvajes tienen Religión. Ni se originó la religión por
motivos de ignorancia o de miedo, porque la mayor parte de los grandes sabios y
verdaderos héroes eran y son religiosos. Tampoco se debe la religión a los
elementos de carácter o costumbre. Tales elementos contribuyen a modificar las
prácticas religiosas, pero no crean la Religión.
V
LA REVELACIÓN
1. -LA REVELACIÓN EN GENERAL
Al tratar sobre la religión en general hemos dicho, que la
religión puede ser natural, cuando se basa en la razón humana, v sobrenatural
cuando Dios mismo instruye al hombre sobre la Religión verdadera. Claro está,
si Dios mismo se revela para manifestar a los hombres la religión verdadera,
todos debiesen dejar su religión natural para practicar exclusivamente esta
religión revelada por Dios.
¡Ahora bien! Hay una religión que afirma ser la única
Religión verdadera por ser ella la Religión revelada por el mismo Dios; la
Religión cristiana. Debemos, pues, demostrar la veracidad del Cristianismo como
Religión revelada.
Pero, para proceder con mayor seguridad, vamos a aclarar
primero las preguntas siguientes:
a) ¿Qué es Revelación?
b) ¿Es
posible la Revelación?
c) ¿Es
necesaria la Revelación?
d) ¿Cuáles
son los Criterios de la Revelación?
1) Definición literal. Revelar significa quitar
el velo, correr el velo de una cosa escondida.
2) Definición real.
Revelación es la comunicación de verdades
religiosas que hace Dios a los hombres de una manera sobrenatural.
Comunicación es la manifestación de ideas que hace una
persona a otra. Es directa la comunicación cuando Dios la hace sin servirse de
seres intermediarios, (habla directamente a Moisés), indirecta cuando se
manifiesta por seres intermediarios. (La creación revela su potestad).
Sobrenatural es la revelación :
a) Porque contiene verdades que la
razón humana por sí sola no puede encontrar o preceptos que el hombre sin la
ayuda de Dios no puede cumplir.
b) Porque la comunicación directa de
Dios con los hombres es algo que está fuera del alcance de las fuerzas
naturales humanas.
3) División de la
Revelación.
Se puede distinguir :
a)
Revelación exterior e interior, según se realiza de una manera visible o únicamente en el interior del alma.
b) Universal y privada según la
Revelación se dirige a la Iglesia para que ella la comunique y obligue a todo
el mundo a aceptarla, o a una alma particular por su bien personal.
2.-LA POSIBILIDAD DE LA REVELACIÓN
La revelación es posible si no hay obstáculo invencible, ni
de parte de Dios ni de parte de los hombres, ni de parte del contenido de la
revelación.
1) Es posible de
parte de Dios. - Dios es un ser personal, inteligente y omnipotente. Como tal
puede manifestar sus ideas a otras personas por todos los medios que
generalmente sirven para trasmitir ideas: por ej. por palabras, escrituras,
signos, etc.
2) Es posible de
parte del hombre. - El hombre es un ser personal e inteligente y como tal
capaz de ponerse en comunicación con otras personas, siempre que se haga de un
modo inteligible. Pero pudiendo Dios adaptarse a cualquier inteligencia, no
hay inconveniente de parte del hombre de recibir una revelación divina.
3) Es posible de
parte del contenido de la Revelación. - Ninguna dificultad hay cuando se trata
de verdades accesibles a la razón humana. En el caso de los misterios hay
cierta dificultad. Pero revelar un misterio no significa hacerlo comprender por
la razón humana sino sólo la existencia del misterio y su significado para la
vida religiosa. Por ej., en el caso del misterio de la Santísima Trinidad la
Revelación no quiere explicarnos cómo es posible que haya un solo Dios en tres
personas, pero sí que existe Dios en tres personas. Y este podemos saber por
medio de la revelación, pero no por nuestra razón.
3.-LA NECESIDAD DE LA REVELACIÓN
1) La Revelación es de necesidad relativa para la Religión
Natural.
El hombre con sola la luz de su razón puede llegar a conocer
todas las verdades fundamentales de la Religión natural : la existencia de
Dios, la inmortalidad del alma, la ley moral y su sanción. Pero la historia de
la humanidad enseña claramente que en rarísimos casos les hombres han llegado a
conocer esas verdades. Por eso, si Dios quisiera que todos los hombres
conocieran esas verdades fundamentales debía revelarías. Así la revelación, en
ese caso, es necesaria, no de un modo absoluto, pero sí relativo.
2) La Revelación es de necesidad
absoluta para la Religión sobrenatural.
Si
Dios quería; como enseña la Iglesia Católica, que los hombres profesasen una
Religión sobrenatural, si por eso quería que conociesen las verdades sobrenaturales
y tuviesen los medios sobrenaturales para alcanzar su fin sobrenatural, entonces
era indispensable la Revelación. Ningún hombre habría podido llegar con sus
propias fuerzas a practicar y profesar esta religión. Para una Religión sobrenatural
la revelación es de necesidad absoluta.
4.-LOS CRITERIOS DE LA REVELACIÓN
Establecida
la posibilidad y la necesidad de la Revelación, nos preguntamos; ¿Cómo podemos
saber si Dios nos ha hablado? ¿Cuáles son los signos y medios que nos sirven
para saber en un caso concreto que se trata de una revelación verdadera y
divina?
Son
los llamados Criterios de la Revelación.
1) Definición literal. - ,,Criterion" es
una palabra griega que significa ,,medio de distinguir".
2) Definición real. - Criterios son signos o
notas que atestiguan claramente que una verdad ha sido revelada por Dios, y a
la vez distinguen exactamente la revelación verdadera de la falsa.
3) Clases de Criterios:
a)
Criterios negativos que prueban que una doctrina no puede ser revelada por
Dios. Por ej., si la doctrina es contraria a las buenas costumbres. Una
doctrina que admite el divorcio o la mentira no puede ser revelada. (Protestantismo).
Una
doctrina que niega la personalidad de Dios o le considera como un ser
imperfecto, no puede ser revelada. (Panteísmo, Islam).
b)
Criterios positivos son los que directamente muestran la verdad de que una
doctrina es revelada. Esos criterios pueden ser:
1) Internos, cuando el mismo contenido de la
doctrina revela su origen divino. Por ej., la sublimidad de la moral que
enseña, la grandeza de las verdades mismas sobre Dios y su obra.
2) Externos, cuando se trata de hechos
exteriores que acompañan la revelación o la publicación de la doctrina y
atestiguan de una manera clara la autenticidad de la revelación. Son frutos de
conversión, de heroicidad de la vida de los que predican las verdades
reveladas.
Pero
en primer lugar son el milagro y la profecía.
Esos
dos criterios ocupan un lugar especial entre todos los criterios porque son los
únicos que de veras, de una manera inconfundible, llevan el sello divino.
Mientras en los demás criterios uno siempre podría tener dudas de su fuerza comprobatoria,
de ninguna manera es posible dudar cuando se trata de un milagro o profecía.
Porque ambos sobrepasan cualquier fuerza creada, el milagro en el orden
material, la profecía en el orden espiritual, así que el único autor es Dios.
Tales criterios son necesarios al hombre, pues necesita la absoluta seguridad
de que viene de Dios la Revelación sobre la cual quiere basar su vida. Y esta
seguridad le dan el Milagro y la Profecía.
5.-EL MILAGRO
1) Definición literal. - La palabra milagro
viene de la palabra latina ,,miraculum" que significa ,,algo que llama la
atención".
2) Definición real. - Milagro es un hecho
sensible, extraordinario y divino.
Sensible
es lo que está al alcance de nuestros sentidos: lo que se puede ver, tocar,
etc. La multiplicación de los panes era tal hecho sensible. Se podía ver y
tocar los panes. Pero la conversión del Pan en el Cuerpo del Señor durante la
Misa no es un hecho sensible, y lo sabemos por la fe. Por eso el milagro de la
consagración no pertenece al grupo de los milagros que entran en la
Apologética.
Extraordinario es lo que está
fuera, sobre o contra las leyes naturales. Un eclipse o terremoto no son
milagros por tratarse de fenómenos según las leyes naturales. Pero producir un
eclipse en otro tiempo del que señala el curso del sol y luna, eso estaría fuera
de las leyes naturales. La resurrección de un muerto, la zarza ardiente, que no
se quema, son hechos, en el primer caso, sobre, en el segundo caso, contra las
leyes naturales.
Divino es lo que sólo Dios puede efectuar. Dios es autor del
milagro también en el caso en que se vale de los ángeles o de los hombres como
ministros. Las alucinaciones, hechicerías, fenómenos ocultistas no son
milagros, porque no puede ser Dios autor de estas cosas.
3) Posibilidad del
milagro. - El milagro es posible, si no hay obstáculo a su realización, ni de
parte de Dios, ni de parte de las leyes naturales.
a) Es
posible de parte de Dios. - Dios es omnipotente y puede hacer lo que le
conviene en sus eternos designios. Él es el Ser perfectísimo. Como tal debe
tener la posibilidad de manifestarse a sus creaturas racionales de un modo
claro, inequívoco y sublime.
Lo que hace Dios en los milagros.
b) Es
posible de parte de las leyes naturales: - Las leyes naturales son establecidas
por Dios. El que las ha dado sigue siendo Señor Supremo de la naturaleza y de
sus leyes. Él puede derogar una ley, la puede suspender en un caso determinado,
o, lo que pasa generalmente en un milagro, puede contrarrestar los efectos de
una ley natural por una fuerza mayor que le opone. Dios según su sabiduría y
omnipotencia puede obrar cómo y cuando le plazca.
6.-LA PROFECÍA
1) Definición
literal: - La palabra Profecía viene del griego y significa lo que se dice en
nombre de otra persona. Profeta es el que habla en nombre o lugar de otro.
2) Definición real:
- Profecía es el anuncio claro y preciso de un suceso futuro libre, que sólo
Dios puede conocer.
Claro es un anuncio cuando sus términos no admiten duda de
qué suceso se trata.
Preciso es el anuncio cuando no cabe duda acerca del lugar o
tiempo del suceso.
Libre es un suceso futuro cuando depende de la libre
voluntad de un ser creado o increado.
Sólo Dios puede conocer tal suceso, si no puede averiguarse
por cálculos o conjeturas, sino se puede saber sólo por el Ser Omnisciente que
es Dios.
3) Posibilidad de la
Profecía: - Que las profecías son posibles se demuestra:
a) Por la
Omnisciencia de Dios. - Sabemos que Dios es omnisciente. Luego conoce todo lo
que pasa, también los sucesos libres y futuros. Por su omnipotencia tiene
todas las posibilidades de anunciar tales sucesos a sus creaturas cómo y cuando
le plazca.
b) Por la
evidencia histórica: - El mismo hecho histórico de haberse cumplido muchas
profecías obliga a admitir que las profecías son posibles. A ese respecto no
hay lugar a duda acerca de las profecías sobre la traición do Judas, la
Resurrección de Cristo, la destrucción de Jerusalén y otras más.
7.-VALOR PROBATORIO DEL MILAGRO Y DE LA PROFECÍA
El Milagro
y la Profecía son los Criterios principales para probar que una revelación es
verdadera y auténtica. Esos dos criterios son como la firma y el sello que pone
Dios bajo una verdad, a fin de manifestar y garantizar así la autenticidad de
esa doctrina como revelada por Él. La Religión, sancionada por Milagros y
Profecías es infaliblemente la única verdadera.
El Milagro
y la Profecía tienen pleno valor probatorio. Pero para saber que se trata de un
milagro verdadero o de una profecía verdadera, deben presentar-se con ciertas
características que garantizan su verdad. Estas características son;
a) La
verdad histórica, es decir, debe constar por testimonio fidedigno que se ha
verificado ese hecho milagroso o anuncio profético.
b) La
verdad filosófica, es decir, debe estar comprobada, que tal hecho sobrepasa de
veras las leyes naturales o que tal anuncio va más allá de las fuerzas de
nuestro intelecto.
c) La verdad teológica, es decir, debe estar
demostrado que únicamente Dios puede ser el autor de ese hecho milagroso o de
ese anuncio profético.
d) La verdad relativa, es decir, debe constar que
tal Milagro o Profecía se han hecho con el fin de probar el origen divino de
una doctrina. Por ej.,Dios puede hacer un milagro para un Protestante, pero
nunca con el fin de aprobar la doctrina protestante como verdadera.
VI
EL HECHO DE LA REVELACIÓN CRISTIANA
1.-DOCTRINA DE LA IGLESIA SOBRE EL HECHO DE LA REVELACIÓN
La
Iglesia enseña sobre el hecho de cómo Dios se ha revelado a los hombres, lo
mismo que San Pablo escribe en el párrafo con que inicia su Carta a los hebreos;
(1, 1-2).
,,Dios,
que en otro tiempo habló a nuestros padres en diferentes ocasiones, y de muchas
maneras por los profetas, nos ha hablado últimamente en estos días, por medio
de su Hijo, a quien constituyó heredero universal de todas las cosas. Por quien
creó también los siglos".
Dios
se ha revelado, ha hablado a los hombres por medio de los profetas en el
Antiguo Testamento. Lo que reveló en aquellos tiempos era luz verdadera, aunque
no plena, sino media luz.
Mandó
entonces Dios al mundo a su propio Hijo ,,para dar testimonio de la
verdad" (J. 18, 37), para traer plena luz y la Revelación. ,, A Dios nadie
le ha visto jamás; el Hijo unigénito, existente en el seno del Padre, el mismo
le ha hecho conocer." (Jn. 1, 18). En Él ,,están encerrados todos los
tesoros de la sabiduría y de la ciencia". (Col. 2, 3). ,,De la plenitud
de este hemos recibido todos nosotros", (J. 1. 16) hemos recibido la luz
plena de la Revelación.
Ese
es el dogma fundamental del Cristianismo; Jesucristo es verdadero Hijo de Dios;
y nos ha revelado y mandado su Religión.
Demostrada
la Divinidad de Cristo y la fundación de la Iglesia Católica hecha por Él,
queda demostrado que la Iglesia Católica es la única verdadera y que todos los
hombres han de pertenecer a esta Iglesia para salvarse.
Antes
de probar estas verdades fundamentales: la Divinidad de Cristo y la fundación
divina de la Iglesia Católica, examinemos las fuentes que nos proporcionan los
argumentos necesarios.
2.-FUENTES DE LA REVELACIÓN
Según la doctrina (le la Iglesia, la
Revelación se encuentra en dos fuentes; la Biblia y la Tradición. Esa verdad la
defendemos contra los Protestantes, que rechazan la Tradición, oponiéndose de
ese modo a la misma Biblia que dice: ,,Estad firmes y mantened las tradiciones
que habéis aprendido, ora por medio de la predicación, ora por carta
nuestra" . (II Tes. 2, 14). Toda palabra de Dios debe mantenerse, esté
escrita o no .
A) La Biblia.
1) La Biblia es el conjunto de los
libros inspirados por Dios y como tales, reconocidos por la Iglesia.
2
La Biblia se divide en los libros
del AT (Antiguo Testamento) y los del NT (Nuevo Testamento) según que han sido
escritos antes o después de Jesucristo. Son 45 del AT y 27 del NT.
Tanto el AT como el NT contiene:
Libros históricos, que relatan hechos históricos
relacionados con la Revelación.
Libros doctrinales, que tienen fines prácticos de enseñanza
y exhortación.
Libros proféticos, que revelan sucesos futuros.
Los libros del AT.
Libros
Históricos: Los 5 Libros de Moisés (Génesis, Éxodo, Levítico, Números,
Deuteronomio), el libro de Josué, el de los Jueces, el de Rut, los cuatro libros
de los Reyes, los dos de los Paralipómenos, el libro de Esdras, el de Nehemías,
el de Tobías, el de Judit, el de Esther, y los dos libros de los Macabeos.
Libros
doctrinales: Job, los (150) Salmos, los Proverbios, el Eclesiastés o
Predicador, el Cantar de los Cantares, la Sabiduría, y el Eclesiástico.
Libros Proféticos: Las Profecías de los cuatro Profetas
mayores: Isaías, Jeremías, Ezequiel y Daniel; las profecías de los doce
profetas menores: Oseas, Joel, Amós, Abdías, Jonás, Miqueas,, Nahúm, Habacuc,
Sofonías, Ageo, Zacarías y Malaquías .
Los Libros del NT.
Libros Históricos: Los cuatro Evangelios según Mateo,
Marcos, Lucas y Juan, y los Hechos de los Apóstoles por San Lucas .
Los libros doctrinales: Las 14
cartas de San Pablo: A los Romanos, Corintios (2), Gálatas, Efesios;
Filipenses, Colosenses, Tesalonicenses (2), a Timoteo (2), Tito,
Filemon, y a los Hebreos. La carta de Santiago, las dos de San Pedro, las tres
de San Juan, y la de San Judas.
Libro Profético: El Apocalipsis de
San Juan.
3) La Inspiración: Inspiración
quiere decir que Dios iluminó la inteligencia de los autores de los libros
sagrados, y movió su voluntad a escribir lo que les sugería. A la vez les
asistió de un modo especial en su trabajo. Por eso: Dios es autor de la Biblia;
es autor principal y los sagrados escritores son autores instrumentales, pero
verdaderos. El contenido de la Biblia es verdaderamente palabra de Dios.
4) La Custodia de la Biblia
corresponde a la Iglesia encargada por Dios de guardar el Depósito de la Fe.
Por eso ella recopiló con número y nombre los libros sagrados en un catálogo
especial llamado Canon. Esos libros ,, canónicos" son los que integran la
Sagrada Escritura o Biblia. Su Guardiana fiel es siempre la Iglesia. Firme e
intransigente defendió a través de los siglos ese tesoro contra los atentados
de casi todos los herejes .
5) La interpretación auténtica de la Biblia
está igual y exclusivamente a cargo de la Iglesia Católica. Jesucristo
confirió (lo que vamos a probar más adelante) a su Iglesia el Magisterio
Infalible y con eso la misión de interpretar auténtica e infaliblemente la
Biblia.
La necesidad de tal autoridad infalible para interpretar la
Biblia se desprende fácilmente de los hechos siguientes:
a) La
Biblia es un libro antiguo, escrito en otro idioma y en el espíritu de una
cultura muy diferente de la nuestra. Nadie, seguramente, puede gloriarse de
tener todos los conocimientos necesarios para una interpretación siempre exacta
de ese libro.
b) La Biblia contiene pasajes difíciles de interpretar. S.
Pedro mismo, el primer Papa, lo atestiguan ya de las Epístolas de S. Pablo:
,,En ellas hay algunas cosas difíciles de comprender, cuyo sentido los indoctos
e inconstantes pervierten de la misma manera que las demás escrituras, para su
propia perdición". 2 Ped. 3,16).
c) Los
Protestantes defienden la libre interpretación de la Biblia. A la vez se
refutan a sí mismos. Porque cada una de las innumerables sectas protestantes
interpreta la Biblia hasta en cosas importantes de manera muy diferente. Claro
está que no contiene la Biblia todas estas abigarradas contradicciones, de las
cuales hace gala el Protestantismo. Más bien tanta confusión de opiniones y
creencias demuestra lo absurdo de la llamada libre interpretación.
6)
La lectura de la Biblia, sobre todo del NT, y en el NT la de los Evangelios,
es de gran provecho espiritual. Para animar a los fieles a la lectura asidua de
la Sagrada Escritura, la Iglesia concede una Indulgencia de 300 días al que,
durante un cuarto de hora, lea los Evangelios.
Según la herniosa palabra del Papa
León XIII, la Biblia es "la carta del Padre celestial dirigida a sus hijos
en la tierra". Sería bien raro si un hijo bueno no leyese con gusto una
carta que le llega de su padre.
Con el fin de proteger el tesoro de
la Biblia, de favorecer su uso y de evitar su abuso, la Iglesia ha ordenado que
los fieles no usen ninguna edición de los Sagrados Libros, que no tenga notas
explicativas y la licencia eclesiástica.
B) La Tradición.
Los Protestantes no admiten más que
una sola fuente de la Revelación: la Biblia, muchas veces mutilada y
adulterada por la libre interpretación.
La Iglesia, además de la Sagrada
Escritura, admite otra fuente, la Tradición.
Tradición se llama el conjunto de
las verdades que los Apóstoles recibieron por la predicación de Cristo o por
inspiración del Espíritu Santo y que fueron trasmitidas de viva voz por la
Iglesia hasta nuestra época.
Se prueba la existencia de la
Tradición.
a) Jesucristo mismo, el maestro por excelencia,
no escribió, sino predicó de viva voz. A su propia predicación, a la Buena
Nueva predicada por El mismo, se refirió cuando mandó a sus Apóstoles: "Id
por todo el mundo y predicad el Evangelio a toda creatura". (Marc. 16,
15) "Predicad", dice, no dice "Escribid". Y a los
fieles les manda muchas veces que escuchen la palabra de Dios. Ni una sola vez
les manda leer.
b) La Iglesia siempre se ha basado en su
predicación en la Tradición. Por sus más prominentes representantes y por los
concilios opuso a los innovadores herejes las doctrinas antiguas, trasmitidas
desde los tiempos de los Apóstoles por los legítimos pastores de la Iglesia.
3.-AUTORIDAD DEL NUEVO TESTAMENTO COMO LIBRO HISTÓRICO
1) Credibilidad
natural de la Biblia.-Para nosotros los creyentes, la Biblia es un libro divino
y tiene por eso autoridad y credibilidad sobrenatural y divina.
Pero uno, que todavía no ha llegado
a la fe, o también nosotros, que queremos defender las verdades fundamentales
contra los infieles, claro está, que no podemos alegar la autoridad divina del
NT que ellos no admiten.
Por eso tomemos el NT como un libro
histórico, para ver si merece plena credibilidad humana y natural. Demostrada
esta credibilidad, también el incrédulo debe admitirlo como base de un sólido
argumento científico para probar la divinidad de Cristo.
2) Condiciones de la Credibilidad de un
libro.-El contenido de un libro histórico es verdadero y merece ser aceptada
como verdad histórica, siempre:
a) Que el
libro sea auténtico, es decir, que el libro sea escrito por el autor al cual se
le atribuye.
b) Que el
autor fuera capaz de decir la verdad, es decir, tenía conocimiento seguro de
lo que escribía.
c) Que el
autor quisiera decir la verdad, es decir, era de carácter sincero, incapaz de
engañar. Como causa agravante podemos añadir:
d) Si el
autor estuviese, por decirlo así, forzado a decir la verdad, obligándole las
circunstancias de la crítica de otros, del propio prestigio, etc.
3)
Las precedentes condiciones aplicadas al NT.-Estas condiciones se verifican
perfectamente en los libros del NT, así que merecen absoluta credibilidad.
a) El NT
es auténtico.-Ya no poseemos los libros materialmente idénticos a los que
escribieron aquellos autores. Pues usaban un material poco resistente.
Sin embargo, se hicieron muy pronto
muchísimas copias de esos libros. Científicos católicos y protestantes que se
ocupan de la llamada "Crítica del texto", a-firman unánimes que el
texto griego actual es esencialmente el mismo texto que escribieron los autores
del NT. Las pequeñas diferencias son de orden gramatical, y no afectan por nada
la esencia del contenido.
Otras investigaciones científicas
han demostrado, que todos aquellos libros fueron escritos por los mismos
autores y en la misma época que siempre había sido a-firmada por la enseñanza
tradicional de la Iglesia .
b) Los
autores eran capaces de decir la verdad.-Todos los autores son Apóstoles,
menos Lucas y Marcos, que eran discípulos de los Apóstoles. De modo que todos
son contemporáneos de Jesús, y, en la mayor parte de los casos, testigos oculares
y auriculares de los acontecimientos que relatan .
Además, la mayor parte de ellos,
estaban años enteros en diaria compañía de Jesús, de manera que conocían bien
su carácter y el sentido de su doctrina. Los mismos Apóstoles habían
comprendido de qué importancia para su misión eran tales circunstancias. Como
prueba sirvan las palabras de San Pedro antes de la elección de un nuevo
Apóstol en lugar del traidor: "Es necesario, pues, que de estos varones
que han estado en nuestra compañía todo el tiempo que Jesús, Señor Nuestro,
vivió con nosotros, empezando desde el bautismo de Juan hasta el día en que,
apartándose de nosotros, subió al cielo, se elíja uno que sea, como nosotros,
testigo de su resurrección", (Hech. 1, 21ss.) .
e) Los
autores querían escribir la verdad.-Todos los Apóstoles eran hombres honestos,
sobrios, de profunda moralidad, hasta Santos, que, por un elevado ideal,
abandonaron y sacrificaron todo.
Sufrieron al fin la muerte, sellando así casi todos con su sangre, la
verdad que habían predicado de viva voz o por escrito .
Todo, hasta lo más sublime, lo
relatan con suma sencillez y nunca por vanagloria. Más bien, manifiestan, con
estupenda sinceridad sus propias faltas. Un embustero y mentiroso es incapaz
de escribir así .
d)Estaban, por decirlo así, forzados a decir la verdad.-Las
verdades del NT, sus acontecimientos, las palabras y sermones de Jesucristo,
todo eso era de reciente actualidad cuando escribían los sagrados autores.
Centenares y miles de personas habían visto y oído las mismas cosas, de manera
que todo lo escrito estaba sometido a la crítica más amplia. Y había muchos
enemigos encarnizados de los Apóstoles y de la doctrina que en aquellos escritos
defendían. Seguridad absoluta tenemos por eso de que los autores no podían
menos de escribir fidelísimamente la verdad .
Lo debían hacer para no ser
refutados y convencidos de impostores por tantos que, con sumo afán, andaban
buscando ocasión y posibilidad para contrarrestar la propaganda del
Cristianismo. De ese modo los enemigos de la verdad contribuían, sin quererlo,
a dar a los siglos venideros el más sólido argumento en favor de la misma
verdad .
Pero los mismos Cristianos velaban
con verdadera escrupulosidad por los libros que consideraban sagrados.
Rechazaban los escritos que no eran auténticos. Ya desde el primer siglo
defendían los escritos auténticos contra otros que no lo eran y que por eso los
denominaban apócrifos (falsos) .
Basta leer los Evangelios sencilla,
sinceramente y sin prejuicio, para convencerse de que la figura y el carácter
de su héroe Jesucristo, nunca pudo ser una invención literaria. Sí los
enemigos (le la verdad son sinceros, admiten, como lo hizo Rousseau, que:
"El sello de la verdad que lleva el Evangelio, es tan estupendo, tan
inimitable que el inventor seria más grande que su héroe".
4.-JESUCRISTO, DIOS Y HOMBRE
Demostrada la credibilidad del NT,
nos ocupamos en primer lugar de la figura central del NT: de Jesucristo. ¿Quién
es Jesucristo? La fe nos dice que Jesucristo es Dios verdadero, hecho hombre. M
mismo resultado, es decir, que Jesucristo es Dios verdadero y hombre a la vez,
llegamos, tomando como base el NT como libro histórico que merece plena
autoridad .
Por eso las pruebas de la divinidad
de Cristo que damos enseguida, tienen pleno valor probatorio para fieles e
incrédulos, siempre que tengan sincero amor a la verdad .
1) Pruebas de la divinidad de
Cristo.
Probamos la divinidad de Cristo por
el testimonio del Padre Celestial, de Jesucristo mismo y de los Apóstoles .
a) El testimonio del Padre Celestial.-Relatando
San Mateo el bautismo de Jesús, escribe: "Bautizado, pues, Jesús, al
instante que salió del agua, se le abrieron los cielos. . . y oyóse una voz del
cielo que decía: Este es mi querido Hijo, en quien tengo puesta mi
complacencia" . (Mat. 3, 16, ss.).
Las mismas palabras se oyen en la
Transfiguración añadiéndose: "A Él habéis de escuchar" (Mat. 17, 5).
Jesús señala también sus milagros
como testimonio de su Padre Celestial: "Las obras que yo hago en nombre de
mi Padre, esas están dando testimonio de mí".
(Jn. 10,
25).
b) El testimonio de Jesucristo.-En palabras
claras que no admiten dudas, Jesucristo demanda para sí los atributos divinos;
cualidades, pues, que exclusivamente corresponden a Dios. Y lo que es más:
esas palabras reciben su sello irrefutable por la misma vida de Jesús y por sus
milagros .
A) El Testimonio de sus palabras.
Jesús reclama para sí:
a)
Preexistencia.-En su Oración sacerdotal dice: "Ahora glorifícame tú, oh
Padre, en ti mismo con aquella gloria que tuve yo en ti antes que el mundo
fuese". (Ja. 17, 5).
b) Vida
divina.-"Así como el Padre tiene en sí mismo la vida, así también ha dado
al Hijo el tener la vida en sí mismo". (Jn. 5, 26).
e) Consubstancialidad con el Padre.-"Mi
Padre y yo somos una misma cosa". (Jn. 10, 30).
d) Omnisciencia.-Que sabe todo, hasta los
pensamientos más secretos de los hombres, - lo prueba al curar al hombre
paralítico. Al haber perdonado al enfermo sus pecados, pensaban mal de Él los
Fariseos. "Más Jesús, viendo sus pensamientos, dijo: "Porque pensáis
mal en vuestros corazones . (Mat. 9, 4).
e) Omnipotencia.-"A mí se me ha dado toda
potestad en el cielo y en la tierra". (Mat. 28, 18).
f) Poder absoluto de legislador.-"Habéis
oído que se dijo a vuestros mayores: No matarás. . . Pero yo os digo:
Quienquiera que tome ojeriza con su her-mano, merecerá que el juez le
condene". (Mat. 5, 21). De modo que Jesús da leyes con la misma autoridad
que el Dios del AT. Varias veces habla de esa misma manera en su Sermón de la
Montaña.
g) Poder de perdonar los pecados.-Dijo al
paralítico: "Hijo, tus pecados te son perdonados". Y responde a la
protesta de los fariseos: "Para que sepáis que el Hijo del hombre tiene
potestad en la tierra de perdonar los pecados (dice al paralítico) Yo te digo:
toma tu camilla y vete a tu casa. Y al instante se puso en pie, y cargando con
su camilla, se marchó a vista de todos". (Marc. 2, 5, ss.).
h) Filiación divina.-Jesús afirma bajo juramento delante de
la autoridad judía que es Hijo de Dios verdadero y en consecuencia de este
testimonio le condenan a muerte por haber blasfemado. "Y díjole el sumo
sacerdote: Yo te conjuro de parte de Dios vivo, que nos digas si tú eres el
Cristo, el Hijo de Dios." Respondióle Jesús: "Tú lo has dicho"
(yo lo soy, Mc. 14, 61). A tal respuesta, el sumo sacerdote rasgó sus vestiduras
diciendo: Blasfemado ha". (Mat. 26, 63ss.) .
B)
Confirmación de su testimonio.
a) Por su vida.
La vida de Jesús es algo único en el
mundo; vida que jamás se ha repetido en ningún ser humano .
Su actitud
en las situaciones más variadas y sus virtudes más luminosas hacen traslucir
una personalidad y un carácter que son lo más sublime de que puede hacer gala
la humanidad en uno de sus miembros. Las palabras y términos humanos jamás
bastan para expresar en modo alguno la excelencia de la santidad de Jesucristo.
Siempre será la brillante estrella del género humano y su sagrado orgullo.
Jamás se descubre en El un pecado o la falta más leve. Estaban espiándole sus
enemigos: era en vano. Él les podía preguntar con toda franqueza: ¿”Quién de
vosotros puede argüirme de un solo pecado"? Esa libertad de faltas y
defectos iba acompañada de la más sencilla y generosa humildad. Sí, la única explicación
de este milagro de santidad, es, que Jesucristo era Dios verdadero .
b) Por sus milagros.
Jesús hizo
muchos milagros que reúnen todas las condiciones que hemos demostrado
necesarias para que sean pruebas de la verdadera Revelación divina.
El mismo confirma que los ha hecho
expresamente con el fin de acreditar su misión divina. Dice: "Las obras
que el Padre me puso en las manos, para que las ejecutase, estas mismas obras
que yo hago, dan testimonio en mi favor de que me ha enviado el Padre".
(Jn. 5, 36).
Relatan los Evangelios de Jesús:
Milagros en la naturaleza, como
conversión de agua en vino, multiplicación de los panes, la pesca milagrosa y
otros más.
Curaciones de diferentes clases: de
lepra, de parálisis, de fiebre, sordera, mudez, etc .
Tres resurrecciones de muertos y su
propia resurrección.
Todos estos milagros son otros
tantos Criterios de su Divinidad. Pero nos limitamos a demostrar en el caso de
su propia resurrección, como este milagro cumbre reúne todas las condiciones,
necesarias para que tenga valor probatorio, dando con eso a la vez la prueba
más rotunda de la divinidad de Jesucristo .
1) Verdad
histórica de la Resurrección.
Tenemos cinco relatos detallados
sobre el hecho de la resurrección. Sus autores, menos San Pablo, han visto y
tratado a Jesús antes y también después de su resurrección .
San Juan presenció la muerte de
Jesús. Estaba presente a la perforación del costado de Cristo que hizo aquel
oficial para cerciorarse de su muerte. Él vio cómo bajaban el cuerpo exánime de
la Cruz y tomó parte en el sepelio .
Jesús se apareció muchas veces y a
muchas personas. Conversó y comió con sus discípulos. Todos ellos lo han visto
subir al Cielo.
2) La
verdad filosófica.
No puede haber duda y hasta los
enemigos, todos admiten que la resurrección de un muerto y por sus propias
fuerzas, sobrepasa todas las leyes y fuerzas naturales.
3) La
verdad teológica.
Sólo Dios es el Señor y Dueño de la
vida. Únicamente Él puede dar o restituir la vida. Si alguien atribuye al
demonio igual poder para dar la vida entonces debe recordar que Jesús fue
siempre enemigo declarado y enérgico del demonio. Su última palabra era:
"Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu". Queda bien demostrado,
que sólo Dios pudo hacer tal milagro.
4) La
verdad relativa.
Jesucristo
mismo ha considerado sus milagros como prueba de su divinidad, como sello de su
misión divina. A sus obras, como pruebas, se refiere tantas veces. Por la
resurrección al fin, por ese milagro de los milagros, quiso convencer a todos
los hombres de buena voluntad, de una manera definitiva. El mismo predijo su
resurrección como prodigio de su misión divina: "Esta raza mala y adúltera
pide un prodigio, pero no se dará sino 1 prodigio de Jonás profeta. Porque así
como Jonás estuvo en el vientre de la ballena tres días y tres noches, así el
hijo del hombre estará tres días y tres noches en el seno de la tierra".
(Mat. 12, 39, ss.).
Siempre ha sido la resurrección de
Jesús, en la doctrina de la Iglesia, la piedra angular, y en la fe de los
hombres, la piedra de toque. A los incrédulos voluntarios de todos los tiempos
van dirigidas las palabras de Jesús, las mismas que dirigió a los incrédulos
de su tiempo y que acabamos de transcribir.
3) El testimonio de los Apóstoles.
Los Apóstoles todos han atestiguado
la divinidad de Jesucristo.
Por esa fe y ese testimonio han dado
su vida. Los dos más destacados testigos entre ellos son San Juan y San Pablo .
a) San
Juan.-Todo su Evangelio está como empapado en testimonios clarísimos de la
divinidad de Jesús. Eso es el único fin de su Evangelio: mostrar y probar que
Jesús es verdadero Dios, una misma cosa con el Padre, Creador como el Padre y
dando la vida como el Padre.
En el mismo modo de relatar los
milagros se muestra claramente el afán de probar por esos milagros que Cristo
es Dios. Con esa finalidad seleccionó de los muchos milagros los que describe
diciendo: "Esos se han escrito con el fin de que creáis que Jesús es el
Cristo, el Hijo de Dios". (J. 20, 31).
b) San Pablo.- EI título favorito con el cual S. Pablo
llama a Jesús, es el título de "Kyrios" (245 veces). Científicamente
está probado, que ese título, que significa "Señor" fue usado en las
religiones del mundo griego para designar a su Dios en los diferentes cultos.
Oponiéndose a ellos; S. Pablo reclama ese título exclusivamente para Jesús.
Escribe: ". . . se cuentan muchos dioses y muchos señores (Kyrios), sin
embargo, para nosotros . . . no hay sino un solo Señor, (Kyrios) que es Jesucristo. . .
(I
Cor. 8, 5, ss.).
4) Consecuencias de las pruebas de
la divinidad de Cristo.
Probada la divinidad de Jesucristo,
ya estamos en plena luz de la Revelación Innegables son las consecuencias
siguientes:
a) Todo lo
que enseña Jesucristo, es palabra divina, es verdad revelada .
b) Todo lo
que manda Jesús, es absolutamente obligatorio .
c) No
puede haber otra religión que la religión de Jesucristo .
d) Jesucristo
es Rey y centro de la humanidad, su modelo e ideal absoluto.
e) Unirse
con Jesucristo significa la salvación, la separación de Él entraña la perdición
.
5) Jesucristo, Dios y Hombre a la
vez.
Jesucristo es Dios verdadero. Lo
hemos probado. Pero no puede haber duda para quien lea el NT, que Jesucristo es
también hombre verdadero. Nace, crece, se desarrolla, habla, vive como un
hombre .
Este misterio nos explica la fe,
diciendo que la segunda persona de la Santísima Trinidad se unió en la
Encarnación con un cuerpo y con un alma humana. Es, pues, la Encarnación la
unión de la naturaleza divina con la naturaleza humana en la persona divina del
Verbo (Dios Hijo). Así Jesucristo es verdadero Dios, por tener la naturaleza
divina; es verdadero hombre, por tener la naturaleza humana. Así en Cristo hay
dos naturalezas, la divina y la humana, pero una sola persona, la divina del
Verbo. Por eso la unión de la naturaleza divina con la naturaleza humana en
Cristo se llama "Unión Hipostática" o personal.
5.-LA MISIÓN DE JESUCRISTO
La Misión de Jesucristo se expresa,
según la voluntad de Dios, en su mismo nombre de Jesús y de Cristo .
a) "Jesús"
- La palabra hebraica "Yehshúa" significa "Dios salva".
Después de
la Encarnación, un Ángel aclaró las dudas de S. José acerca de María con las
palabras: "Dará a luz a un hijo a quien pondrás por nombre Jesús, pues Él
ha de salvar a su pueblo de sus pecados". (Mat. 1, 21). Salvar al mundo
del pecado y de las funestas consecuencias del pecado: esa es su Misión en la
tierra: Ser Salvador del Mundo.
b) “Cristo" - La palabra deriva
del griego y significa "Ungido'' (¡en hebreo Mesías!). Era costumbre en
el AT el ungir a los profetas, a los sacerdotes y a los reyes. Como Jesús es
Sumo Profeta o Maestro, Sumo Sacerdote o Santificador, y Sumo Rey o Gobernador,
por esa razón es El Ungido por excelencia. En esta misma triple cualidad se
manifiesta también la Misión de Salvador.
1.-Como Profeta y Maestro, Jesús
salva al mundo de las tinieblas de la ignorancia y del error, enseñando la
verdad acerca de Dios y los deberes de los hombres y su destino eterno.
2.-Como Sacerdote y Santificador,
Jesús salva al mundo de la muerte del pecado; dándole por su propio sacrificio,
la fuente de vida y santidad: su sagrado Corazón.
3.-Como Rey y Gobernador, Jesús
salva al mundo guiándolo, mediante sus sabias leyes en su Iglesia, por el
sendero que lleva a la eterna bienaventuranza.
VII
LA IGLESIA CATÓLICA
De lo que hemos explicado hasta
ahora, se sigue claramente, que es de una necesidad vital el adherirnos a
Cristo para salvarnos. Por eso nos preguntamos, ¿dónde encontramos a
Jesucristo? ¿Dónde se predica su doctrina? ¿Dónde se comunica su vida y gracia?
¿Dónde rigen sus sagradas leyes?
En respuesta se alza ante nosotros
la Iglesia Católica proclamando: Yo soy la Iglesia de Cristo, la única que fue
fundada por Él y encargada de continuar su obra de enseñar a la humanidad, de
santificaría y de guiarla a su destino eterno.
Y de veras tiene plena razón de
afirmar eso como vamos a ver enseguida.
Pero antes expliquemos brevemente el
significado de la palabra "Iglesia Católica".
1) Definición
literal.-La palabra "Iglesia" se deriva de la palabra griega ekklesía
y significa reunión de los
llamados".
La palabra
"católica" viene igualmente del griego y significa
"universal".
2) Definición
real.-En el lenguaje religioso la palabra "Iglesia católica" puede
tener 3 sentidos.
a) El templo material
para el servicio religioso católico.
b) La
comunidad de los fieles católicos de una ciudad o de un país, por ej. : La
Iglesia católica del Perú, etc.
c) La
sociedad visible y jerárquica, instituida por Cristo, de todos los bautizados
que profesan la misma fe, tienen los mismos sacramentos y obedecen al mismo
Papa como Jefe supremo.
En este
último sentido empleamos la palabra en nuestras lecciones.
A veces se
toma la palabra Iglesia en un sentido sigo más amplio para abarcar también los
fieles difuntos, sea en el cielo, sea en el purgatorio. Se habla entonces de la
Iglesia militante (los fieles en la tierra) doliente (los files en el
Purgatorio) y triunfante (los beatos en
el Cielo).
Iglesia
docente se llama al Papa con los
Obispos y sacerdotes. Iglesia oyente a los simples fieles.
1.-FUNDACIÓN DE LA IGLESIA CATÓLICA POR JESUCRISTO
Dividiendo el argumento en dos
partes, tenemos:
A) Cristo
instituyó una Iglesia.
B) Esta
Iglesia de Cristo es la Iglesia Católica.
A) Cristo
instituyó una Iglesia.
1) Jesucristo
preparó la fundación de su Iglesia desde el comienzo de su vida pública.
En sus sermones anunció la llegada
del Reino de Dios. Sus oyentes que cono-cían el AT no podían entender esa
palabra, sino de una sociedad visible, semejante a la Sinagoga. Habla Jesús
también claramente de su reino futuro, como de un reino, no solamente
espiritual, sino visible y organizado. Lo compara con una grey guiada por su
pastor, con un árbol al cual acuden las aves, etc.
Escogió
doce Apóstoles que, bajó su dirección, debían formar el núcleo de su pueblo
escogido, del Nuevo Israel, como los doce patriarcas habían formado el
principio del pueblo escogido del AT.
2)
Jesucristo prometió la fundación de su Iglesia diciendo a San Pedro:
"Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mí Iglesia; y las puertas
del infierno no prevalecerán contra ella. A ti te daré las llaves del reino de
los cielos. Y todo lo que atares sobre la tierra, será también atado en los
cielos; y todo lo que desatares sobre la tierra, será también desatado en los cielos".
(Mat. 16, 18).
De ese texto se desprende claramente
que:
a) Jesucristo va a fundar una
Iglesia.
b) Esa Iglesia tendrá como Jefe a
San Pedro.
e) Estará organizada,
como reino que tendrá los elementos que le son necesarios, como son :
legislación, jurisdicción, etc.
d) Esta Iglesia será
eterna.
3) Jesucristo
efectuó la fundación de su Iglesia.
a) Dando a
S. Pedro el primado. Después de su resurrección le dijo : "Apacienta mis
ovejas, apacienta mis corderos". (Jn. 21, 15). Ese lenguaje figurado significa
: "Obra como Jefe de toda la grey, de todos los fieles".
b) Encargando a sus Apóstoles, bajó
la dirección de S. Pedro, a organizar a todos los fieles con el fin de
salvarlos por medio de la profesión de fe, del uso de los sacramentos y de la
obediencia a la legítima autoridad. Antes de subir al cielo, pues, les dijo :
"íd por todo el mundo; predicad el Evangelio a toda criatura. El que
creyere, y se bautizare, se salvará; pero el que no creyere, será
condena-do". (Marc. 16, 15).
e) Promulgando solemnemente la
institución de su Iglesia, al enviarle el Espíritu Santo, para que sea alma
vivificadora de la Iglesia.
El día de Pentecostés los Apóstoles
comprendían perfectamente cuanto de boca de Jesús habían oído acerca de la
Iglesia.
Pedro ejerce desde aquella hora su
misión de Jefe, predicando, bautizando y ordenando, ayudado por los demás. Bajo
su dirección empiezan inmediatamente su tarea apostólica.
De ese modo queda establecida la
primera comunidad cristiana, gobernada por los Apóstoles bajo el mando de S.
Pedro. La Iglesia vive, crece, se fortalece y va a conquistar el mundo.
B) La
Iglesia Católica es la Iglesia de Jesucristo.
Jesucristo
fundó una Iglesia. El mismo permanece en ella hasta la consumación de los
siglos.
Pero hay
muchas comunidades que se llaman cristianas y afirman ser la Iglesia de
Jesucristo. ¿Cómo, pues, conocer la verdadera Iglesia de Jesucristo?
Contestamos
: La Iglesia Católica es la Iglesia de Jesucristo y sólo ella. Por que ninguna
otra tiene aquellas notas distintivas que Jesucristo dio a la Iglesia por Él
fundada.
Son las
notas de Unidad, Santidad, Catolicidad y Apostolicidad.
I.-Unidad.
1) La Iglesia de Jesucristo debe ser
una.
a) Jesucristo fundó una sola
Iglesia. Jamás habla de sus Iglesias sino siempre de su Iglesia, en singular.
Todos los fieles deben formar "un solo rebaño bajó un solo pastor".
(Jn. 10, 15). Puso a San Pedro como único fundamento de la Iglesia. Le dio
plenitud de poder sobre todo su reino y sobre todos los fieles. No es, pues,
posible que haya más que una sola Iglesia de Jesucristo.
b) A la vez Jesucristo dio a su
Iglesia la unidad interior que se constituye por el triple lazo de la misma
fe, los mismos sacramentos y la obediencia a la misma autoridad. Basta recordar
las palabras del Señor arriba citadas sobre la necesidad de la fe, del bautismo
y de la obediencia para convencerse de la necesidad de la unidad interior.
2) La Iglesia Católica es una.
Todos los
católicos tienen la misma fe, contenida en el mismo Credo, y profesan las
mismas verdades religiosas. Tienen los mismos siete sacramentos y el mismo
sacrificio de la Misa. Todos obedecen al mismo Papa, como Jefe supremo de toda
la Iglesia.
3) Sola
la Iglesia Católica es una.
La Iglesia
Católica es la única en el mundo y a través de los siglos que tiene esa unidad.
Ninguna de las sectas que pretenden ser fundadas por Jesucristo, pueden
ostentar la unidad. No puede haber unidad de fe cuando cada uno busca en la
Biblia, según su criterio, privado, su propia fe y su propio credo. Unos admiten
más, otros menos; unos un sólo sacramento, otros ninguno. Y nunca reconocen
autoridad suprema y única.
Consecuencia:
Consta que la Iglesia de Jesucristo debe ser una.
Por eso entre todas las llamadas
Iglesias cristianas hay una sola que es la Iglesia verdadera de Cristo.
Esta única Iglesia de Cristo debe
tener la unidad interior. La Iglesia Católica tiene esa unidad y ella sola la
tiene.
Luego la Iglesia Católica es la
Iglesia de Cristo.
II.-Santidad.
1) La Iglesia de Jesucristo debe ser
santa:
a)
Jesucristo dio a su Iglesia los medios de santificación en los sacramentos,
sobre todo en el augusto Sacramento de la Eucaristía.
b) Jesucristo requiere de los
miembros de su Iglesia que imiten su ejemplo de santidad suma.
c) Jesucristo exige de los suyos una
santidad tal que sirva para convencer a los demás de la verdad de su doctrina
y los conquiste para su reino: "Brille así vuestra luz ante los hombres,
de manera que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que
está en los cielos". (Mt. 5, 16).
2) La
Iglesia Católica es santa.
a)
La Iglesia Católica ha conservado todos los siete sacramentos que administra a
los fieles celosamente, como medios necesarios y eficacísimos de santificación.
b)
Predica a Jesucristo como ejemplo de suma santidad.
c)
Innumerables son sus hijos e bijas cuya luz de santidad heroica brilla ante
los hombres, de modo que ellos glorifiquen a Dios por tales maravillas de
santidad en hombres mortales.
3) Sola la Iglesia Católica es
santa.
a)Ninguna
secta hay (fuera de la llamada Iglesia ortodoxa) que todavía posea los siete
sacramentos de Jesucristo, mucho menos la sagrada Eucaristía. Con eso les
faltan los medios principales de santificación.
b) Entre los pretendidos
"santos" de las sectas acatólicas y los Santos de la Iglesia católica
hay una diferencia grande que salta a la vista siempre que uno se ocupe
detenidamente de la vida de esas personas. Hay entre aquellos, seguramente,
personas de buena fe y buna voluntad y de cualidades excelentes; pero no
significa nada en comparación con el número inmenso de los Santos católicos y
su admirable y heróico grado de Santidad, comprobado tantísimas veces por Dios
con estupendos milagros.
Consecuencia:
La Iglesia de Jesucristo debe ser santa, la Iglesia católica es santa, y sola
la Iglesia Católica es santa.
Luego : La
Iglesia Católica es la Iglesia de Jesucristo.
III.-Catolicidad.
1) La
Iglesia de Jesucristo debe ser católica.
a) Ya los profetas
habían anunciado que el reino del Mesías sería un reino universal. El término
"universal" es idéntico al de "católico". Debe, pues, ser
un reino para todos los hombres de todas las naciones y de todos los tiempos.
"He aquí que yo te he destinado para ser luz de las naciones, a fin de que
tú seas la salud enviada por Mí hasta los últimos términos de la tierra".
(Is. 46, 6).
b) El Ángel Gabriel en la
Anunciación dice de Jesucristo: "Su reino no tendrá fin". (Lc. 1,
33).
c) Jesucristo mismo indica
claramente la catolicidad de su reino diciendo a sus Apóstoles : "Id por
todo el mundo; predicad el Evangelio a toda creatura". (Mc. 16, 15>.
2) La Iglesia Católica es católica.
Es muy significativo que esta
Iglesia desde sus principios ha sido distinguida con el nombre de
"Católica".
Desde el
día de Pentecostés hasta hoy, la Iglesia católica nunca se olvidó de su nota
católica o universal. Jamás dejó de trabajar por la conversión de todo el
mundo, de todas las razas, de todas las naciones, de todas las clases sociales,
declarándose siempre como la Iglesia universal, sin decaer jamás al estado de
una Iglesia particular o nacional.
Hoy esa
Iglesia es efectivamente "la Católica", pues es Iglesia difundida por
todo el mundo, en todas las naciones y razas, dirigiéndose constantemente a
ricos y pobres, a todas las clases trabajando con todo afán a convertir hasta
los pueblos más salvajes.
3) Sola la
Iglesia Católica es católica.
Ninguna de
las sectas cristianas merece el nombre de "católica", Muchas ni
quieren serlo. Y todas han terminado por hacerse iglesias regionales o
nacionales, y siempre con carácter particular.
Entre
todas las Iglesias que se llaman cristianas no hay más que una sola que ha sido
y sigue siendo católica : ¡La Iglesia Católica! Ya es un hecho muy significativo
que el número de sus fieles (alrededor de 4'000.000) es mayor que el de
cualquier otra secta.
Consecuencia:
La Iglesia de Jesucristo debe ser católica. La Iglesia Católica es católica,
sola la Iglesia Católica es católica.
Luego : La
Iglesia Católica es la Iglesia de Jesucristo.
IV.-Apostolicidad.
1) La Iglesia
de Jesucristo debe ser apostólica.
Eso quiere decir, que la autoridad y los
poderes que Jesucristo confirió a sus Apóstoles, deben continuarse en los
sucesores de los Apóstoles en su Iglesia.
a) Jesucristo
fundó su Iglesia con San Pedro como fundamento. La Iglesia no va a perecer
hasta el fin del mundo. Luego debe continuar su fundamento, debe continuar
Pedro en sus sucesores.
b) A todos los Apóstoles Jesucristo
promete estar con ellos hasta la consumación de los siglos. Los Apóstoles eran
hombres mortales, no podían vivir hasta el fin del mundo. Luego deben vivir en
sus sucesores.
2) La Iglesia católica es
apostólica.
Está probada científicamente (y hasta los mismos protestantes lo admiten
por la fuerza de los documentos históricos) la sucesión ininterrumpida de la serie
de los Papas desde San Pedro hasta Pío XII.
Igualmente ininterrumpida llega
hasta nuestros días la serie de los Obispos de la Iglesia Católica desde los
tiempos de los Apóstoles, cuyos sucesores legítimos son ellos.
3) Sola la Iglesia Católica es
apostólica.
Todas las Iglesias que se llaman
cristianas tienen su origen en una separación de la Iglesia Católica. Sabemos
bien las fechas históricas en que se han se-parado. Ninguna llega en sus
comienzos a la edad de los Apóstoles.
Ninguna de ellas hace siquiera la
tentativa de considerar su suprema autoridad (¡si es que tienen una!) como
derivada de San Pedro.
Aunque en la Iglesia ortodoxa tengan
la sucesión apostólica de los Obispos, son como cuerpo sin cabeza por falta de
la Jefatura suprema, elemento esencialísimo de la Iglesia de Cristo.
Consecuencia: La Iglesia <le
Jesucristo debe ser apostólica, la Iglesia Católica es apostólica. Sólo la
Iglesia Católica es apostólica. Luego: La Iglesia Católica es la Iglesia de
Jesucristo.
2.-LA MISIÓN DE LA IGLESIA
Jesucristo dio a su Iglesia la
misión de continuar su obra salvadora aquí en la tierra. Podemos decir, que
según la voluntad de su fundador, Jesucristo mismo quiso tomar la forma de su
Iglesia para continuar en la tierra su obra. Así la Iglesia es el mismo Cristo
que sigue enseñando como Maestro, santificando como Sacerdote y guiando las
almas como buen Pastor, llevando en esa forma a cada uno de los fieles los
frutos de su Sacrificio de la Cruz. He aquí la Misión de la Iglesia.
8.-LOS PODERES DE LA IGLESIA
De lo que acabamos de decir se
desprende que la Iglesia, para cumplir con su Misión divina, debe tener (y
tiene de Cristo mismo!) el triple poder del Magisterio, del Sacerdocio y del
Gobierno pastoral o jurisdicción.
a) El Magisterio es la potestad de
la Iglesia de predicar la doctrina de Jesucristo en todo el mundo. Eso derecho
y ese deber tiene la Iglesia por orden divina. Ninguna autoridad, ninguna
potestad en el mundo puede impedir el ejercicio de esa potestad de la Iglesia.
b) El
Sacerdocio es la potestad de la Iglesia de santificar las almas, por medio de
la administración de los Sacramentos, sobre todo de la Sagrada Eucaristía.
e) El Gobierno pastoral o
jurisdicción es la potestad de la Iglesia de guiar las almas por el camino de
la virtud, por medio de leyes, preceptos, consejos y sanciones.
4.-LAS PRERROGATIVAS DE LA IGLESIA
De la
Misión que tiene la Iglesia y de su triple poder, se deducen fácilmente sus
Prerrogativas, que son Perpetuidad, Infalibilidad, Indefectibilidad y
Necesidad.
a) Perpetuidad:
Jesucristo la prometió a su Iglesia, cuando dijo a San Pedro: "Tú eres Pedro y sobre esta
piedra edificaré mi Iglesia; y las puertas del infierno no prevalecerán contra
ella". (Mt. 16, 18).
Las
puertas del infierno significan todas las funestas potestades que pueden salir
de aquellas puertas, lanzadas por las furias de los demonios contra la Iglesia.
Es todo en vano La Iglesia sigue hasta la consumación de los siglos. Es
perpetua.
b) Infalibilidad: La
Iglesia tiene la constante asistencia de Jesucristo. Fue encargada por El para
enseñar la verdad a través de los siglos. Por esa razón bien obvia, debe ser
infalible. Una Iglesia que enseñaría errores, no seria la Iglesia de Cristo.
Por eso, infalibilidad significa, que el Magisterio oficial de la Iglesia nunca
puede enseñar doctrinas falsas, ni puede la totalidad de los fieles creer esas
doctrinas erróneas. Claro está, que desde este momento ya no existiría la
Iglesia de Cristo.
c) Indefectibilidad: - Indefectibilidad quiere decir, la
imposibilidad de perder algún elemento esencial de les que Jesucristo confirió
a su Iglesia. - A pesar de que en el curso de los siglos hayan sobrevenido
cambios accidentales en la
forma exterior de la vida de la Iglesia, no ha perdido ninguno de los elementos
esenciales para salvar a los hombres, ni en su doctrina, ni en los sacramentos,
ni en su organización divina.
d) Necesidad:
- Se trata de la necesidad de pertenecer a la Iglesia para salvarse.
Jesús
fundó su Iglesia como católica, quiere decir, para todos los hombres de todos
los tiempos y de todas las naciones. El mismo dice : "El que creyere y se
bautizare, se salvará; pero el que no quiere oir a la iglesia, será gentil y
publicano"
(Mt. 18, 17).
De todo
esto se deduce: Existe grave obligación para todos (le entrar en la Iglesia
Católica para salvarse. Los que por mala voluntad no pertenecen a la Iglesia,
se condenarán.
"Fuera
de la Iglesia no hay salvación" - dice un axioma teológico. Quiere decir
eso, ¿que todos cuantos no pertenecen a la Iglesia Católica se perderán?
El axioma
es exacto y se sigue esta verdad de la Prerrogativa de la Necesidad. Para
entenderlo bien y aclarar debidamente la dificultad, que se presenta, hay que
distinguir entre el Cuerpo y el Alma de la Iglesia.
El Cuerpo de la Iglesia es la
sociedad visible bajo el régimen del Papa. A él pertenecen todos los bautizados
que reconocen esa autoridad y no se han separado de ella, ni han sido
expulsados por ella de la Iglesia.
Al Alma de
la Iglesia pertenecen todos les que viven en la Gracia Santificante.
Claro
está, que elles, si perseveran en la Gracia Santificante aunque fuera del
Cuerpo de la Iglesia, se salvarán.
De modo
que sigue en todo su rigor el citado axioma: ¡Fuera de la Iglesia no hay
salvación! Hay que pertenecer a la Iglesia, a lo menos a su Alma. ¡Sin eso no
hay salvación!
VIII
LA IGLESIA CUERPO MÍSTICO DE CRISTO
Nuestro
tratado sobre la Iglesia nos ha demostrado principalmente su aspecto exterior,
quedando sin decir lo más bello de la Iglesia, lo de su aspecto interior con la
riqueza resplandeciente de su hermosura sobrenatural y la lozanía de su vida
divina.
Par a
decir a lo menos algo sobre ese aspecto interior de la Iglesia resumimos ahora
brevísimamente la reciente Encíclica de nuestro Papa Pío XII sobre la Iglesia
como
EL CUERPO MÍSTICO DE CRISTO
Dice el Santo Padre que el Divino
Redentor "se vale de la Iglesia para perpetuar la obra comenzada".
"Ahora bien, para definir y
describir esta verdadera Iglesia de Cristo -que es la Iglesia santa, católica,
apostólica, Romana- nada hay más noble, nada más divino que aquella frase en
que se la llama el Cuerpo Místico de Cristo".
A) Cuerpo.
1) "Si la Iglesia es un cuerpo,
necesariamente ha de ser una sola cosa indivisa, según aquello de San Pablo
: "Muchos formamos en Cristo un
solo cuerpo". No es, pues, cosa puramente espiritual e invisible.
2) "El cuerpo necesita también
multitud de miembros, . . . que mutuamente se auxilien". Cada miembro
tiene señaladas sus funciones vitales. Así no sólo los sacerdotes, sino todos
los fieles por ser verdaderos miembros de ese cuerpo, tienen también funciones
importantes y vitales en la Iglesia. Nadie queda exceptuado, ni jóvenes, ni
viejos, ni casados, ni solteros, ni trabajadores, ni dirigentes .
3) Como el cuerpo humano se ve
dotado de sus propios medios para vivir y desarrollarse, del mismo modo la
Iglesia. Tiene como medios sobre todo los Sacramentos: Por el Bautismo se
nace, la Confirmación fortalece y robustece, la Eucaristía alimenta, la Confesión
cura, la Extrema Unción prepara para el tránsito a la vida eterna. El
Matrimonio procura el crecimiento ordenado del Cuerpo Místico en el orden
natural; el Orden Sacerdotal favorece al crecimiento y progreso del Cuerpo
Místico en el orden sobrenatural .
B) Cuerpo de Cristo.
1) A Cristo pertenece ese Cuerpo,
porque El fundó la Iglesia, aboliendo el Antiguo Testamento y estableciendo el
Nuevo Testamento en su propia sangre, y mandando al Espíritu Santo como
vivificador y alma (leí Cuerpo .
2) El Cuerpo tiene por cabeza a
Cristo. El es cabeza do la Iglesia por las razones siguientes:
a) Por
razón de su Excelencia.-La cabeza es el miembro más digno del cuerpo.
Jesucristo que no es sólo hombre, sino a la vez verdadero Dios, él es el más
digno, el "primogénito entre muchos hermanos" (Ro. 8, 29).
b) Por
razón de su Gobierno.-Jesucristo rige la Iglesia entera por su Espiritu Santo
y por sus representantes, el Papa y los Obispos .
e) Por
razón de la mutua necesidad. - Como en un cuerpo la cabeza necesita del cuerpo
para poder vivir y el cuerpo no puede vivir sin la cabeza, así se puede y debe
afirmar "que Cristo también necesita de sus miembros". Es, pues, una
necesidad que Él ha querido y dispuesto, y así necesita de la cooperación de
los miembros de su cuerpo en la obra de la salvación .
d) Por
razón de la semejanza.-Es Jesucristo semejante a nosotros por tener la misma
naturaleza que nosotros los miembros como que es también verdadero hombre .
e) Por
razón de la plenitud.-Es Cristo "lleno de gracia y verdad". (Jn. 1,
14), lleno de aquélla vida divina que comunica a sus miembros iluminándolos y
santificándolos .
C) Cristo es sustentador de su
cuerpo.
a) Jesucristo sigue viviendo en la tierra en su Iglesia de
tal modo que la Iglesia es Cristo, es otro Cristo o segundo Cristo. Tanto se
identifica Cristo ron su Iglesia
y la Iglesia con Cristo, que podemos decir con toda razón que en y por la
Iglesia Cristo mismo enseña y
bautiza, Cristo gobierna, liga y desata, Cristo ofrece y sacrifica .
b) Como la vid manda la savia a todos los sarmientos
o ramas y los sarmientos no pueden existir sin esa obra sustentadora de la vid,
así Cristo manda y comunica
al Espíritu Santo a todos los miembros de su cuerpo, que no pueden conservar su
vida divina sin esa obra de Cristo por el Espíritu Santo .
c)
El Espíritu Santo es el Espíritu del Cristo mismo. Es para su cuerpo el alma
dándole al cuerpo su unidad y su vida interior .
D) Cristo es Salvador de su cuerpo.
Cristo ha
salvado a los hombres todos dando por ellos como precio su santísima sangre. De
manera que son suyos los miembros de su cuerpo de un modo muy especial. Tiene
pleno derecho de dueño el que se adquirió esos miembros por un precio tan
grande.
E) Cuerpo Místico
El concepto del cuerpo místico no
debe confundirse con el concepto de cuerpo físico ni con el del cuerpo moral.
a) El
cuerpo físico, como lo tiene cada ser humano, no admite en sus miembros la
independencia de libertad y personalidad. El cuerpo místico deja a todos sus
miembros su independencia de libertad y
personalidad.
b) El
cuerpo moral, como el "cuerpo
docente" de un colegio, no es más que una unión de personas que se
comprometen a perseguir un mismo fin. El lazo de unión entre ellos es aquel fin
exterior, es por eso un lazo solamente exterior. La Iglesia empero tiene un
principio de unión interior, que es el mismo Espíritu Santo que une y vive y
obra en y por todos los miembros.
c) El
Cuerpo Místico tiene muchos miembros que son los hombres, y tiene una alma que
es el Espíritu Santo. Como cada hombre es un compuesto de cuerpo y alma, así la
Iglesia es un compuesto de cuerpo y alma. Lo exterior de la Iglesia es la
organización que abarca a todos los miembros; lo interior es la vida divina que
penetra y vivifica a los miembros por la obra del Espíritu Santo.
"Conoce, oh cristiano, tu
dignidad, y una vez hecho participante de la naturaleza divina, no quieras
volver a la antigua vileza con tu conducta degenerada. Acuérdate de qué Cabeza
y de qué Cuerpo eres miembro". (S. León, Papa) .