Orar con los Misioneros del Sagrado Corazón
Primera Semana: Viernes
No-violencia
Siguiendo el ejemplo de Jesús, nos
esforzaremos por llevar a los demás a Dios
con bondad y dulzura, para unirlos a El
mediante el amor y librarlos del temor.
Confiando en la gracia de Dios,
estaremos dispuestos a dar,
si es preciso, nuestra vida por ellos.
Constituciones MSC 12
Fue despreciado y marginado, hombre doliente y enfermizo, como de taparse el rostro por no verlo. Despreciable, un Don Nadie.
Él ha sido herido por nuestras rebeldías, molido por nuestras culpas. El soportó el castigo que nos trae la paz, y con sus heridas hemos sido curados.
Isaías 53, 3.5
Silencio
Señor Jesucristo, tú tienes un corazón abierto para toda la miseria de nuestro mundo. Por eso venimos hacia ti:
Tú no actúas con violencia y estás al lado de los débiles y cansados: te pedimos por todos ellos y por aquellos que no ven una salida para resolver sus problemas.
Tu misericordia con los pecadores brota de tu corazón compasivo: te pedimos por todos aquellos que se desesperan por la falta de misericordia entre los hombres.
Tú tienes un corazón para los despreciados y marginados, para los no tomados en cuenta y los no amados: te suplicamos por ellos y por todos aquellos que son culpables de su malestar.
Tu corazón está abierto para todos los que llevan una vida infrahumana: te suplicamos por todos ellos y por aquellos que les podrían ayudar a llevar una vida más humana.
Señor, danos fuerza para luchar con éxito contra los males de nuestro tiempo. A ti la gloria y el honor por los siglos de los siglos. Amén.