Domingo 20 del Tiempo Ordinario A - 'Qué grande es tu fe' - Catequesis preparatoria para niños: preparemos la Acogida de la Palabra de Dios proclamada durante la celebración de la Misa dominical
Falta un dedo: Celebrarla
1. Pasaje del domingo
2. Catequesis
Catequesis: Jesús nos prueba para que crezca nuestra fe
Meta: En lo que respecta a la fe conviene no olvidar que en primera instancia es un don de Dios aunque este caso insistamos más bien sobre el aspecto de la respuesta humana para que los niños desarrollen una actitud confiada que no reniega de Dios porque no parece ayudarnos en este preciso instante y de la manera que nosotros lo quisiéramos.
La Catequesis
Ayuda verdadera
Un escritor visitó una escuela
para niños excepcionales: espásticos y enfermos de poliomielitis. Observó
corno un niño de estos trataba de cruzar el patio apoyándose en sus muletas.
No lo logró porque cayó de bruces y a pesar de sus esfuerzos no podía
levantarse. Se acercó un profesor que se quedó parado a tres pasos. El niño le
suplicó que le ayudase a levantarse pero sonriendo el profesor negó con la
cabeza. Le dio tanta rabia al niño que golpeó con los puños el suelo y se puso
a gritar. Al que observaba le pareció que era un profesor desalmado. El niño
renovó sus esfuerzos para incorporarse y lo logró. Entonces el profesor lo
abrazó. El observador comprendió que el profesor sabia ayudar de verdad: le
ayudó al niño a ayudarse a si mismo.
A la primera vista la actitud del profesor parece muy dura. No ayuda y se queda parado sin hacer nada. ¿Por qué el observador dijo luego que la actitud del profesor era correcta?.... (Dejó al niño que lo haga él). Así es. Porque cuando uno está enfermo, ya no quiere hacer esfuerzos y esto es malo. Cuando uno no hace esfuerzos entonces se vuelve cada vez más inútil. En el evangelio escuchamos que el Señor hace corno si no quisiera ayudar a la mujer. ¿Y la mujer qué hace? ¿Se retira sin decir nada, desilusionada?.... (No, sigue pidiendo) ¿Es que ella tiene mucha?... (Fe). Supongamos que Jesu's antes de que hablara le hubiera sanado a la hija, ¿qué habría sido diferente? En otras palabras: ¿cuándo hay que hacer más esfuerzo, cuando las cosas son fáciles ó cuando son difíciles? ...(cuando son difíciles). ¿Cuando hay más amor, cuando uno hace mucho esfuerzo por los demás ó poco esfuerzo?.... (Mucho esfuerzo). Cuando hay más fe uno hace mayor esfuerzo, ¿cuando las cosas son fáciles ó difíciles?.... (Difíciles). Así que el aparente rechazo de Jesús produce en la mujer mayor fe. Y nos enseña a nosotros a proceder de igual manera. Así Dios a veces no nos escucha porque quiere que tengamos mas fe.
La fe decide
Ahora les voy a proponer un caso: Supongamos que entre a la Misa un niño que no sabe nada de Jesús. No entiende como es la misa pero se pone a pensar en Dios y piensa como puede ser mejor. Y la Iglesia está llena de niños católicos que conocen a Jesu's y saben perfectamente como es la Misa y lo que significa cada parte, sin embargo están como aburridos y no piensan en Jesús. ¿Quién vale más a los ojos de Jesús, el niño aunque no entiende nada ó los niños católicos?.... (El niño que no entiende nada). Es que tiene fe y se porta como alguien que tiene fe mientras que los demás niños conocen pero no tienen fe. Se dan cuenta aunque uno sea católico eso no significa que uno sea mejor por serlo.
Aplicación
Ahora bien en la Misa tenemos que portarnos como alguien que tiene fe. ¿Cómo se hace eso?.... ¿Y durante la semana queremos también vivir corno cristianos que tienen una fe fuerte?.... (Si). ¿Y cómo lo haremos? ¿Recuerdan la historieta que les conté al comienzo? Jesús es como ese profesor, nos enseña, nos alimenta pero deja que nosotros mismos nos levantemos, nos pongamos a caminar, nos pongamos a trabajar. ¿Cómo lo haremos?....Y recuerdan que Jesús nos mira sonriendo y feliz por cada esfuerzo que hagamos.
3. Vivencia
Hay muchas novenas al Señor o a los Santos del lugar. Lamentablemente sólo se reza cuando hay alguna desgracia o algún problema en la familia. Escojamos una novena sencilla de una devoción conocida del lugar e invitemos a los niños a que pidan a sus padres la realicen pidiendo algún favor más general: la conversión de los pecadores, por los misioneros o por la Iglesia en general.
4. El niño
Los niños tienen aún una actitud no-complicada ante Dios. Más de una vez su oración atrajo la bendición de Dios cuando las oraciones de los adultos parecían en vano. El niño tiene fe en Dios porque tiene confianza en los hombres (¿aún!?) mientras nosotros los adultos muchas veces la hemos perdido por tantas razones justificadas e injustificadas. ¡Si pudiéramos conservar en los niños esta confianza que cuenta con la debilidad humana pero siempre va al encuentro del otro! Es, pues, la misma actitud de Dios.
5. Condición Previa
¿Por qué no aplicamos a nuestra vida lo que deseamos para los niños? Los carismáticos tienen una maravillosa oración, la de pedir "sanación interior", es decir, pedirle al Señor cure las heridas espirituales y psíquicas que los adultos llevamos dentro. El que está "sano" por dentro puede acercarse al otro sin sentir los roces dolorosos de las cicatrices interiores ocasionadas por encuentros desafortunados, desilusiones y engaños sufridos. Recorra su vida, cuando llegan a la memoria esos recuerdos dolorosos, pídale al Señor le que quite la amargura, el rechazo, conceda la fuerza de poder perdonar y que la herida sane.
Queremos ayudar
a que los niños, por medio de la catequesis dominical, puedan
compenetrarse de la Palabra de Dios proclamada durante la Misa Dominical
Parroquial. De
ningún modo queremos dar
pie al terrible malentendido como si pretendiéremos colaborar en sustituir
la Misa Dominical de la Comunidad Parroquial con una Misa para Niños.
Tenemos una
seria acusación al
respecto.