Domingo 2 de Adviento C: Catequesis preparatoria para niños - para poder acoger con fruto la Palabra de Dios proclamada durante la celebración de la Misa dominical
¿Cómo acoger la Palabra de Dios?
Falta un dedo: Celebrarla
1- Pasajes del Domingo
1.1 Primera Lectura: Baruc 5, 1-9
1.2 Segunda Lectura: Filipenses 1, 4-6. 8-11
2.- Catequesis
2.1 Catequesis I: CRISTO VENDRÁ
Meta
Queremos ayudar al niño para que descubra la virtud de la esperanza como
"un sentimiento gozoso" del que sabe que el Señor vendrá. A la vez
queremos quitarles el miedo que produce normalmente la descripción de
los signos de los últimos tiempos. La mezcla intencional de espera tanto
de la Navidad como de la Venida de Jesús al fin de los tiempos busca
abrir una dimensión en la fiesta de Navidad que en general no se toma en
cuenta.
La Catequesis
Los acontecimientos son signos de esperanza
Recuerdo el último temblor. La tierra comenzaba a temblar, los vidrios
se sacudían haciendo un ruido raro. La gente comenzó a salir corriendo
de su casa. Algunas personas estaban gritando. ¿Por qué la gente está
gritando cuando hay un terremoto?... (Porque tiene miedo). Tiene miedo
que les va a pasar algo. ¿Tiene miedo de?...
(Morir). Nadie quiere morir. Sin embargo les digo que el
terremoto es también una experiencia para sentir alegría y esperanza.
¿No me lo creen? Se lo explicaré.
Conocí a un muchacho al que le había crecido la uña del dedo gordo de su
pie derecho hasta hundirse en la carne, lo que le causaba muchos
dolores. Llamaron al médico. Este sacó de su maleta un bisturí, un
cuchillo
muy
afilado. Le dio miedo al muchacho. ¿Por qué?... (Porque el médico le iba
a cortar). Esto también puede doler mucho. El médico ¿por qué hace estas
operaciones?
¿Porque le gusta hacer sufrir a la gente o para curar?...
(Para curar) Le dolió mucho al muchacho cuando el médico lo operó
el dedo
gordo. Pero aguantó y casi no lloró. ¿Cómo creen que se sintió luego?...
(mejor).
Así es. Pudo caminar nuevamente sin sentir dolor.
Algo similar pasa cuando hay un terremoto
u otra desgracia. Nos da miedo la muerte. Después de morir
¿adónde queremos llegar?.... (Al cielo). Allí contemplaremos a Dios y
estaremos felices para siempre. Así hasta un terremoto esconde detrás de
su fachada amedrentadora algo
bonito como
una casa vieja que por fuera se
ve fea y por dentro tiene
todas las comodidades.
Cuando hay un terremoto, alguna desgracia, aunque tengamos miedo, ¿en
qué vamos a pensar?... (En que luego vamos a ser felices con Dios). Por
eso las cosas terribles que cuenta Jesús en el
evangelio son señal de algo maravilloso. Cuando hay angustias,
cuando la gente morirá de espanto, cuando hay signos en el sol y en la
luna.
Jesús nos dice que levantemos la cabeza. ¿Por qué?...
(Porque de todas maneras vamos ser felices con Jesús). Así es,
Jesús vendrá para llevarnos al cielo.
Veremos a Jesús
Pronto vamos a celebrar la fiesta de Navidad. ¿Ustedes recuerdan la
fecha?.... (El 25 de diciembre). Es una fiesta muy bonita porque
recordamos algo que sucedió hace 2 000 años. ¿Qué pasó?... (Jesús
nació). Era la primera vez que el Hijo de Dios
vino a este mundo. V endrá otra vez y será la ultima vez porque
nos va a recoger a todos para llevarnos al cielo. ¿Cuando va a ser?....
(Al fin del mundo). De todos modos vamos a ver a Jesús.
Jesús está presente ahora
Cuando Jesús venga por nosotros, ¿cómo quieren ustedes que Jesús los
encuentre? ¿Con cólera, amargos, peleando?... (No, amables, sonrientes,
en paz con todo el mundo). Hay una buena razón para
serlo ahora. Les voy a contar una historieta y me van a
comprender muy bien.
Una niña cuyo papá había muerto
vivía sola con su mamá que tenía trabajar para ganar el pan para
las dos. Llegó un momento que le tocó un trabajo muy fuerte de manera
que no podía estar mucho tiempo con su hija ni sabía el momento cuando
podía hacerlo. Con todo el
lugar del trabajo se encontraba al otro lado de la calle de la casa.
Ella siempre podía ver a su hija y de vez en cuando dar
un saltito para ocuparse de las
cosas de la casa. Así sucedió que la niña, al levantarse, encontraba el
desayuno listo y la casa limpia, pero la mamá no estaba. No la pudo ver.
Al volver del colegio encontró el almuerzo listo y una nota cariñosa de
su mamá. Y, por supuesto, la niña siempre saludaba con la mano cuando
pasó por la casa donde trabajaba su mama porque sabía que ella miraba
por la ventana.
Algo similar pasa cuando decimos que Jesús está presente sin que lo
veamos. El mismo nos prepara una comida ¿?.... (La santa comunión).
Nos ha dejando muchas notas cariñosas ¿dónde?. .... (En la
Biblia). Le podemos saludar con la mano cuando pasamos por su casa.
¿Cómo lo hacemos?... (Nos santiguamos cuando pasamos delante una
Iglesia). Como ven, Jesús está presente de muchas maneras. Pero hay una
gran diferencia entre Jesús y la mamá de la que les estaba hablado. La
mamá sólo puede estar en un lugar ¿y Jesús?... (Está en todas partes).
¡Vigilad y Orad!
Si de tantas maneras Jesús está presente es lógico que tenemos que
prestar atención a Jesús aunque no lo veamos. Había una vez un muchacho
que vivía en la selva con sus
ladres, lejos de cualquier poblado. En la casa tenían una radio que
recibía y transmitía mensajes. Un día sus padres tuvieron que
ausentarse. Le dejaron la radio para él pueda hablarles. ¿Cuántas veces
habrá hablado con sus padres? ¿Una vez al mes?... (No). Les habrá
hablado ¿cada?... (Día). Para poder darse cuenta si sus padres
querían hablarle, ¿el muchacho podía alejarse mucho?... (no).
Tenía que estar cerca para escuchar. Si se alejaba mucho ya no puede
oírles.
Nosotros para hablarle a Jesús no necesitamos radio. ¿Cómo le
hablamos?... (Rezando). ¿Le hablaremos una vez al mes?.. .(No, cada
día). Cuando dejamos de hablar
con Jesús, ¿nos
acercamos o nos alejamos?.... (Nos alejamos). Miren, sus padres sabían
que si el muchacho
se
alejaba de la casa y de la radio éste podía correr peligro porque la
selva puede ser muy peligrosa. De la misma manera cuando dejamos del
hablar con Jesús y nos alejamos de él podemos correr el peligro de
amargarnos, de pelear.
Se dan cuenta
cuando uno está cerca de Jesús en su corazón,
Jesús puede venir visiblemente en cualquier momento y nos
encuentra sanos, buenos
y preparados. Así el niño que
no se alejaba de la radio, cuando llegaron sus padres, estaba sano y
salvo. Lo mismo pasa con nosotros y con Jesús.
Maniobra
Cada adviento, es decir, el
tiempo de preparación a la venida del Señor en Navidad, hacemos como una
maniobra de los que esperan a Jesús. ¿Cómo lo esperamos? ¿Tristes,
amargos, alejados?... (no, alegres, muy cerca a Jesús). Por estas cuatro
semanas haremos todos como un ensayo, como
una maniobra para prepararnos
que venga Jesús. Cuando tenemos que hacer algo difícil, ¿cómo haremos?
Recuerdan la casa vieja por fuera y bonita por
dentro. La primera impresión es triste pero cuando entramos ¿cómo nos
sentiremos?... (alegres). Y ¿qué haremos durante estas
4
semanas? ¿Recuerden al niño de la selva?... (hablaremos con Jesús, no
nos alejaremos). Para no olvidarnos, aprenderemos un lema que nos
ayudará a recordar.: "JESÚS VIENE". También podemos hacerlo de manera
distinta. Ustedes gritan:
"Ya viene". Yo les preguntaré: "¿Quién?" Y ustedes contestarán: "Jesús".
¿Lo repetimos?....
2.2 CATEQUESIS
II: ESTAR PREPARADOS
Meta
¿Qué les parece si podríamos despertar en los niños un sentimiento
similar al de los primeros cristianos cuando hablaban de la venida de
Jesús? Es tomar en serio que Jesús
corresponde cuando decimos:"¨¡Ven, Señor Jesús!"
La Catequesis
Ejercicio
Reunimos un grupo de niños
ante el grupo grande. Les decimos al grupito:
Supongamos que estalle
algo extraordinario
en la Iglesia (salón) en este momento. ¿Qué
podríamos hacer? No, no digan nada. Piensen un momento lo que van a
hacer. Cuando yo grito: "¡Fuego", ustedes
hacen lo que tienen pensado como si fuera en serio. ¿Listos?
Cuando grito: "Bomberos!" dejan de actuar y se reúnen conmigo.
LUEGO DEL EJERCICIO CONVERSAMOS CON ELLOS PREGUNTANDO ACERCA DE
LO QUE HAN HECHO Y POR QUÉ LO HAN HECHO. RECOMENDAMOS ESPECIALMENTE A
LOS QUE SE HAN PREOCUPADO POR SALVAR A LOS DEMAS
Ejercicio II
CON EL MISMO GRUPO O CON OTROS QUE HAN SIDO CONTAGIADOS SE REALIZA EL
SIGUENTE EJERCICIO:
Supongamos que venga Jesús con todo su poder
gloria. Y esto va a suceder cuando yo grito: "¡Ya viene!". Entonces
ustedes comienzan a actuar como haciendo
mímica, es decir sin hablar. Ustedes representan lo que quieren
hacer. Piensen un momento en silencio. Cuando diga: "¡Ya está!", dejan
de actuar y se reúnen conmigo. ¿Listos?... LUEGO DEL EJERCICIO SE
CONVERSA CON LOS NIÑOS ACERCA DE LOS QUE HAN HECHO Y POR QUE LO HAN
HECHO Y SE VA APUNTANDO EN UNA CARTULINA LO QUE HA SALIDO DE BUENO.
EN UNA OPORTUNIDAD UNA NIÑA SE
PUSO A BAILAR Y A BATIR
PALMAS. AL FINAL TODOS BAILAMOS Y BATIMOS PALMAS PARA EXPRESAR NUESTRA
ALEGRÍA. LA META SE HABÍA LOGRADO.
¿Qué haremos?
Les voy a contar una historieta: Un grupo de amigos estaba reunido
mirando como dos
de ellos estaban jugando ajedrez. Uno de los jugadores era san Domingo Savio. Comenzaron a conversar acerca de lo que haría cada uno si supiera
que dentro de una hora moriría. Uno dijo:"Me iría a la Iglesia para
confesarme". 0tro dijo:"Yo me pondría a rezar". Otro dijo:"Iría
rápidamente a mi casa para pedir perdón por mi comportamiento de ayer".
Preguntaron a Domingo Savio:"¿Y qué harías tú?" Contestó él:"Seguiría
jugando ajedrez."
Era el más sereno de todos porque se había
esforzado desde la mañana de hacer bien las cosas: a su debido
tiempo había rezado, se había confesado, había pedido perdón de
inmediato cuando ofendió a un familiar suyo. Podía seguir jugando.
Nosotros, qué haríamos si supiéramos que Jesús vendría dentro de una
hora?... (Seguir con lo que estamos haciendo). Entonces cuando nos toca
jugar ¿qué haremos sabiendo que Jesús viene pronto?... (Seguir jugando).
¿Qué haríamos cuando nos toca estudiar y sabemos que Jesús viene
pronto?... (Seguir estudiando). Si estamos haciendo un paseo con nuestra
familia o estamos con ellos en la casa?.... (Seguiremos con ellos). Si
estamos rezando y nos avisan que viene Jesús?.... (Seguimos rezando). Se
supone que estamos haciendo lo que toca en este momento: cuando toca
rezar rezamos, etc. Esto, todo esto lo quiere decir Jesús cuando nos
dice: "Estén despiertos y orando en todo tiempo".
Aplicación
Trataremos de hacer bien todas las cosas que nos tocan hacer como si
Jesús llegara dentro de poco. ¿Lo haremos por miedo o porque queremos
estar bien dispuestos cuando Jesús venga?.... (Queremos estar bien
dispuestos).
2.3 CATEQUESIS III: ENTRENAMIENTO PARA LA VENIDA DE JESÚS
Meta
¿Estamos convencidos que vale la pena de hacer los esfuerzos que exige
la vida cristiana? Muchos se quejan de que ser cristiano es muy difícil
especialmente cuando a los "malos" les va tan bien. Ayudemos al niño en
el descubrimiento que vale la pena de luchar, superarse, sacrificarse.
Catequesis
Entrenamiento es necesario
TRATE QUE VENGA UN DEPORTISTA CONOCIDO. SOLO NECESITA CONTAR UN POCO DE
SU VIDA. LOS NIÑOS ESTARÁN MUY ATENTOS. NUNCA OLVIDARÉ
EL AMBIENTE
DE
ATENCIÓN CUANDO A UN GRUPO
DE JÓVENES DE LA PARROQUIA LOS VISITÓ
UN FUTBOLISTA CONOCIDO
SI NO LO PUEDE CONSEGUIR
HAGAMOS LO SIGUIENTE:
Haciendo alusión a un deportista conocido por todos: ¿Cómo habrá llegado
a ser un deportista tan famoso? ¿Qué debe hacer a diario?... (Entrenar).
Exacto. ¿Cómo se hace?
¿Cómo proceden, por ejemplo, los que
hacen carreras de bicicletas?...
(Montan bicicleta). ¿Una vez al mes?... (No, cada día)
Así es: hacerlo otra
y otra vez hasta que uno lo sabe hacer muy muy bien. De la misma manera
todos los que queremos
leer
libros, periódicos, la Biblia etc. ¿Qué necesitamos hacer antes?...
(Aprender a leer). Por lo tanto necesitamos entrenarnos en¿?... (La
lectura). Así cuando un niño quiere aprender a caminar que debe
hacer?... (Intentar e intentar una y otra vez a caminar). Más tarde
queremos desempañar una profesión, por ejemplo, de sacerdote.
¿En que debe entrenarse?... (Rezar, estudiar, etc.)
Nos entrenaremos para a venida de Jesús
En qué momento vamos a saber definitivamente si Dios nos va a llevar al
cielo?.. (Cuando morimos).
¿A quiénes llevará al cielo? ¿A los egoístas, a los coléricos? .... (No)
. Cuando uno fácilmente se enoja,
¿basta que diga: "Ya no me enojaré", o
más bien debe luchar constantemente?.... (Debe luchar
constantemente.
Yehudi Menuhin ha un gran violinista que tocaba maravillosamente. El
mismo cuenta: "Si dejo de ensayar un día, yo mismo me doy cuenta que
algo falta cuando toco en un concierto. Si dejo de ensayar dos días, se
da cuenta mi mujer. Si dejo de ensayar tres días el público se da
cuenta". Se dan cuenta, el entrenamiento es para toda la vida.
Con alegría
Ahora puede ser que uno tenga miedo al pensar que Jesús nos puede llamar
en cualquier momento, p.e. al salir de la Iglesia, o mañana o dentro de
un mes. Escuchan lo que pasó a un cristiano inglés al que condenaron a
morir ahorcado porque no quería dejar su fe en Cristo y en la Iglesia.
Le hicieron subir la escalera y le pusieron
la soga alrededor del cuello. Luego lo soltaron. ¿Saben lo que pasó? Se
rompió la cuerda y el hombre se
cayó
al suelo. Apenas había recobrado el conocimiento, el mártir se apresuró
a subir la escalera. "No te apures tanto, le dijo el verdugo, ya vas a
morir". "Hermano, le dijo el mártir, si hubieras visto lo que yo vi, tu
también te apresurarías a
morir pronto". No sabemos
lo maravilla que nos espera. Nadie lo ha visto
lo que Dios
tiene preparado a los que lo aman. Es para estar triste o alegre cuando
Jesús nos llama?.... (Alegre)
Programa de entrenamiento
Así que tenemos que entrenarnos con alegría para la venida de Jesús. Y
los que se entrenan ¿lo hacen cuando se les ocurre o regularmente?...
(Regularmente). Muy bien, vamos a hacer un programa de entrenamiento.
Vamos a escribir en la cartulina las cosas importantes en la vida de un
cristiano. ¿Cuáles son?.... (Oración amor, estudiar, etc.,
etc.). Ahora cada uno escoge una cosa para entrenarse en ella
durante la esta
segunda
semana de Adviento. Nuestro lema: "Corramos con
fuerza la prueba, fijos los ojos en Jesús"(Heb 12,2).
Sugerencias para
vivir el Adviento en familia
3.1 Cada semana se prende una velita más en una pequeña celebración de
Adviento. Lectura del evangelio que escogen los padres o uno de los
hermanos mayores, una canción y una oración. Si alguien todavía puede
contar un cuento apropiado para los
pequeños, puede contribuir así mucho a crear un ambiente de
Adviento que los niños no olvidarán.
3.2 Se arma el pesebre sin figuras. Cerca se coloca una cajita con
pajitas o algodón.
El niño (4-8 años) que cree haber hecho algo más
de lo acostumbrado por los demás, puede colocar una pajita o un
algodoncito en el pesebre
para preparar así el lecho para
el niño Jesús. (Nadie prohíbe a los adultos de participar).
3.3 El
comercio ofrece
almanaques que cada día traen una nueva figura a recortar.
Así el niño arma su propio nacimiento.
3.4 Cuando los niños rezan su oración de la noche, lo pueden hacer ante
la vela encendida de Adviento. Ayúdenles a escribir sus propósitos de
Adviento en el espejo, en la mesita de noche, en
la
puerta, etc. donde los
puede ver constantemente.
3.5 Quizás la
familia reunida en consejo familiar decide sobre algo que quieren
hacer entre todos, para vivir el Adviento
en familia.
4.
LITURGIA
4.1 Elementos a reforzar
Coloquemos cerca del pesebre a armarse lentamente un tronco ("raiz de
Jesé") con cuatro velas. Cada domingo se prende una más.
Algún domingo se
"olvida" de prender
la vela y los niños se encargan de vigilar para que se encienda la vela
correspondiente.
Al orar el Padrenuestro se puede repetir tres veces cada vez gla con más
intensidad la petición: Venga a nosotros tu reino.
4.-
EL NIÑO
El niño goza con la espera de un acontecimiento. No ha llegado
a esa espera del adulto que perdió la ilusión y muchas veces se
encierra en la pasividad. El niño puede vivir la esperanza activa como
respuesta. No necesitamos
elevar todo al nivel intelectual de la reflexión. En muchas
oportunidades basta que lo experimente.
5. Condición previa
Creo que los catequistas necesitamos descubrir (¿de nuevo?) que la
palabra del Señor es viva y eficaz. Por supuesto, ¡no dudamos! No pongo
en duda su fe. Pero dígame: su corazón vibró al leer las palabras de
Cristo y cuando asegura que volverá por Usted. Recobremos la ilusión de
los primeros cristianos y así nos acercaremos por lo menos un poco más a
la espera gozosa de nuestros niños.