Disfruten de
la Palabra Divina de los Domingos tomados de la mano de los Padres de la
Iglesia, de los Santos y Sabios de todos los tiempos y del Catecismo de la
Iglesia Católica (Nota Bene: Los números consignados entre paréntesis ( ) hacen referencia a los números del Catecismo).También puede saltar a: “Eché raíces en
un pueblo glorioso” CONTENIDO A. Comentario de Sabios y Santos I. LA PALABRA
DE DIOS
* Eclo 24,1-4;12-16: “La sabiduría habita en
medio del pueblo elegido” * Sal 147,12-15.19-20: “La Palabra se hizo
carne y acampó entre nosotros” * Ef 1,3-6;15-18: “Nos predestinó a ser hijos
adoptivos suyos por Jesucristo” * Jn 1,1-18: “La Palabra se hizo carne y acampó
entre nosotros” A. Comentario
de Sabios y Santos
Suplementos
II. APUNTE
BÍBLICO-LITÚRGICO
* No es aventurado pensar que S. Juan tuviera delante el texto del
Eclesiástico a la hora de redactar el famoso Prólogo de su Evangelio. La
Sabiduría desciende de Dios para hablar con su pueblo. Y se le atribuyen
acciones que en otros textos bíblicos son exclusivas de Dios. * Hoy, al reflexionar de nuevo sobre este texto, podemos decir que S. Juan
pretende una presentación global del misterio de Cristo. Cristo es Palabra que
se oye, se ve; es Luz que vence a la tiniebla y alumbra a todos; es Vida que
destruye nuestra muerte. Se trata de la Palabra Encarnada como un Proyecto de
vida vivido...una Palabra que interpela. III.
SITUACIÓN HUMANA
* El hombre de hoy se siente permanentemente asediado por mensajes y
palabras que pueden acabar convirtiéndose en “pura palabrería”. Y esto genera
desconfianza. Más aún: a veces se le presentan palabras y mensajes que
pretenden ser la última palabra, la definitiva y única sobre algo. Más que
nunca se hace necesaria la capacidad crítica. * En la era de los medios de comunicación de masas, el hombre experimenta
en muchas ocasiones una tremenda soledad, se siente profundamente incomunicado
porque no acaba de comprender el lenguaje o porque los mensajes no le interesan
o no le incumben, o se hace el desentendido. No es que esté solo. Es que está
aislado en medio de la masa. Lo cual es peor. IV. LA FE DE
LA IGLESIA
* La fe
_ Jesucristo, verdadero Dios y verdadero Hombre: “El acontecimiento único y totalmente singular de la Encarnación del Hijo
de Dios no significa que Jesucristo sea en parte Dios y en parte hombre, ni que
sea el resultado de una mezcla confusa entre lo divino y lo humano. Él se hizo
verdaderamente hombre sin dejar de ser verdaderamente Dios. Jesucristo es
verdadero Dios y verdadero hombre. La Iglesia debió defender y aclarar esta
verdad de fe durante los primeros siglos frente a unas herejías que la
falseaban” (464; cf. 465). _ Jesucristo, Señor del mundo y de la historia: 450. * La respuesta
_ Jesucristo, manifestación plena de la verdad de Dios: “En Jesucristo la verdad de Dios se manifestó en plenitud. ``Lleno de
gracia y de verdad'' (Jn 1,14), él es la ``luz del mundo'' (Jn 8,12), la
Verdad. El que cree en Él, no permanece en las tinieblas. El discípulo de
Jesús, ``permanece en su palabra'', para conocer ``la verdad que hace libre'' y
que santifica. Seguir a Jesús es vivir del ``Espíritu de verdad'' (Jn 14,17)
que el Padre envía en su nombre y que conduce ``a la verdad completa'' (Jn
16,13)” (2466). _ La Palabra de Dios, fuente de oración: 2653. 2654. * El testimonio cristiano
_ “... Así como nuestro verbo, concebido en la mente es invisible, pero se
hace sensible manifestándolo exteriormente con la voz, así también el Verbo de
Dios existe invisiblemente en el corazón del Padre, según la generación eterna
y por la Encarnación es sensible para nosotros” (Sto. Tomas, Summa contra Gent.
4,46). _ “¿Qué cosa más sabia y conveniente que realizar, para la perfección de
todo el universo, la unión de lo primero y de lo último, esto es, del Verbo,
Principio de todas las cosas y de la naturaleza humana, la última de todas las
criaturas?” (San Buenaventura, Breviloquio, 41 parte). El misterio de la Palabra hecha carne quiere decir que la última palabra
sobre el mundo y su salvación la tiene Dios por medio de Jesucristo. vea:
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