La jerarquía de los adventistas
Consulta
Jerarquia o estructura de desendencia de la iglesia. bueno quisiera
saber su jerarquia de la iglesia como estan conformados quien va en la
cabeza es decir su estructura
Respuesta
Adventistas del Séptimo Día
Organización:
"El máximo nivel administrativo corresponde a la Asociación General",
ubicada en Washington; integrada por el Presidente y por un Consejo
ejecutivo elegido cada 5 años. Tienen dividida la tierra en 12 Divisiones,
que se subdividen en Uniones, éstas en Asociaciones o Misiones, que a su vez
se componen de varias congregaciones o comunidades locales, dirigidas por
los presbíteros-ancianos, los pastores, los diáconos y las diaconisas, que
tienen que cumplir las directrices del Consejo de la iglesia local. Son
elegidos por sus propias comunidades de entre los que tienen más categoría o
antigüedad (los ancianos) o cierta preparación: «estudios teológicos» (los
pastores).
«El gobierno supremo compete a los congresos quinquenales en los que
delegados elegidos democráticamente se definen sobre todos los asuntos
puestos en cuestión, tanto administrativos como doctrinales. En las
congregaciones locales cada año se eligen democráticamente a los dirigentes,
y no sólo existe el derecho individual al voto, sino incluso al veto, como
se puede ver claramente en el Manual de la Iglesia.
Los dirigentes locales cada 4 años como promedio (puede variar de un lugar a
otro), eligen delegados que en congreso libre y abierto eligen
democráticamente a los dirigentes de la Misión. Asociación o Unión. Estos a
su vez eligen a los dirigentes de los niveles superiores: División (la
Euroafricana, a la que pertenece España, tiene su sede en Berna, Suiza) y
Asociación General. Estos dirigentes son "administradores", pero carecen de
prerrogativas para definir todo lo que se refiere a fe y costumbres, Eso
únicamente es prerrogativa del congreso de la Asociación General en su
reunión quinquenal, donde todos los estamentos eclesiásticos
(administradores, pastores. editores, redactores, colportores), incluidos
los laicos, tienen voz y voto» (Carta, 4).
El «derecho al veto» consiste en que «cuando una comisión presenta cualquier
propuesta a la asamblea de la iglesia local constituida por todos los
bautizados, un solo participante que lo solicite puede hacer que la
propuesta tenga que ser reconsiderada. Si la comisión mantiene su propuesta,
entonces se somete a votación y se adopta el criterio mayoritario» (Carta,
16.1.1997, p. 2). Se llama colportor la persona que se dedica a la difusión
y venta de publicaciones, editadas por la iglesia adventista, que tienen por
objetivo ayudar a la gente a adquirir un estilo de vida más saludable en las
distintas dimensiones de la salud (física, mental, social y espiritual).
«Todos los creyentes son sacerdotes», pero hay «diferencia de función no de
rango (esencial), entre los ministros y los laicos» (Comentario a CF, 11).
Algunas obligaciones:
«Los adventistas procuran seguir fielmente todas las indicaciones
alimentarias del A. Testamento (Gen 9,4; Lev 3,17 y cap. 11). Propugnan como
régimen alimentario el de Adán y Eva (Gen 1.29; 3.1) que era vegetariano (o
más bien modernamente el ovolactovegetariano o lactovegetariano, con el fin
de evitar posibles carencias). Los adventistas consideran la obra médica y
de salud como el «brazo derecho» de su iglesia, y mantienen facultades de
enfermería y de medicina (Argentina, Brasil, EE. UU., etc.) clínicas,
dispensarios, leproserías, centros de educación para la salud, aviones y
lanchas médicas y hospitales, en todo el mundo...
Los adventistas consideran un deber cristiano donar aceptar sangre para
transfusiones, no tomarla como alimento (Carta del 23. 1. 1 997). Omite que
en G 9.3 se autoriza la comida de carne, al margen de la alimentación
vegetariana en la mítica Edad de Oro (Metamorfosis de Ovidio, discurso a los
cabreros de Don Quijote, etc.). Deben «abstenerse de alimentos impuros
identificados como tales en las Escrituras, de las bebidas alcohólicas, del
tabaco, del empleo irresponsable de drogas y narcóticos» (CF, 21). Se
financian mediante el abono del diezmo y las ofrendas de los miembros, los
donativos circunstanciales, la venta de sus publicaciones, los alimentos
naturales. etc.
(Guerra, Manuel. Diccionario enciclopédico de las Sectas. Madrid. BAC 21999,
pp. 34-35).
¿Por qué no sigue el Cursillo sobre las Sectas?